Los estadounidenses Jeffrey C. Hall, Michael Rosbash y Michael W. Young fueron premiados este lunes con el Premio Nobel de Medicina.
Los investigadores fueron reconocidos por sus aportes a la investigación del "ritmo circadiano", el reloj biológico que funciona en ciertos seres vivos, incluyendo el cuerpo humano, para regular los procesos según los movimientos planetarios.
Desde la academia que entrega el reconocimiento destacaron que "sus descubrimientos explican cómo las plantas, animales y humanos adaptan su ritmo biológico para que esté sincronizado con las vueltas de la Tierra".
Nuestro reloj biológico regula patrones de sueño, comportamiento alimenticio, liberación de hormonas y presión sanguínea.