Fanáticos de todo el mundo han reaccionado al mortal incendio que arrasó con el estudio de animé japonés Kyoto Animation Co, mejor conocido como KyoAni.
Decenas de personas murieron y resultaron heridas por el fuego, por el que las autoridades responsabilizan a un hombre de 41 años aparentemente enojado con la compañía.
Y mensajes como "Mantente fuerte, KyoAni. Toda la comunidad de anime está a tu espalda", hacen evidente el papel especial que el estudio ocupa en el corazón de sus fanáticos.
Al menos 33 personas se han confirmado muertas, pero se cree que más víctimas están desaparecidas. Otras 40 personas fueron ingresadas al hospital, varias en condición crítica.
Y la policía local ya identificó al sospechoso del incendio como Shinji Aoba, quien habría irrumpido en el estudio el jueves cargado con dos bidones con gasolina.
Según testigos que presenciaron su arresto, Aoba acusa a KyoAni de haberle robado ideas.
Una cultura especial
KyoAni fue fundado en 1981 y ha producido populares programas animados, entre ellos "K-On" y "La melancolía de Haruhi Suzumiya".
En 2006 el estudio también lanzó el largometraje "Una voz silenciosa" (Koe no Katachi), muy bien recibido por la crítica.
Y una de sus series, Violet Evergarden, fue retomada por Netflix para un mercado global.
"Una de las cosas que más sobresalen de Kyoto Animation es la calidad de la animación", dice Ian Wolf, un crítico de anime para Anime UK News.
"Es muy amigable para el espectador", explica Wolf, para quien el estilo visual distintivo y el alto nivel de cuidado de KyoAni producen una apariencia que se reconoce al instante.
"El estudio hace muy pocas cosas polémicas... poco que sea violento o sexual. No puedo imaginar por qué alguien querría atacarlo", agrega.
Algunos proyectos recientes incluyen "Libre", un programa sobre el equipo de natación de niños de una escuela que ha demostrado ser popular entre las mujeres, y está programado para tener su propia película para que coincida con los Juegos Olímpicos de Tokio de 2020.
Mientras que "Una voz silenciosa" es una película basada en un manga de Yoshitoki Oima que trata sobre un abusador que atormenta a un compañero de clase con una discapacidad auditiva, pero más tarde debe aceptar sus acciones cuando él mismo es acosado.
El diario inglés The Guardian le dio cuatro estrellas en su reseña, calificándola como "una película seductora: sutil, sensual y delicada".
Además de la calidad de su contenido, el estudio también goza de muy buena reputación por la forma en la que lo produce.
Un usuario de Reddit que discutió el ataque lo calificó de "un faro de lo que debería ser la industria del anime" por sus políticas de personal y la capacitación interna.
Eso, según Wolf, se debe en parte a su forma de pagarle a su personal.
Efectivamente, KyoAni también es conocido por pagarle un salario regular a sus animadores, rompiendo así con la práctica de pagar por cuadro, típica de la industria que se considera como forma de presionar al personal.
Tributos y donaciones
Para la experta en cine japonesa Yuichi Maeda, KyoAni es simplemente "una de las mejores y más grandes firmas de animación de Japón".
"Con esa pérdida de vidas, es probable que muchas delas mejores manos en animación en la nación estén muertas", le dijo a la agencia Reuters.
"Es demasiado doloroso de contemplar", agregó Maeda, para quien el impacto de KyoAni sobre la industria del anime era mucho mayor que la que sugería la cantidad de trabajos que producía.
"Tiene una gran presencia en la animación aquí. Hacer que mueran tantas personas a la vez será un gran golpe para la industria de la animación japonesa", insistió.
Y aunque KyoAni puede ser más conocido en Japón que en el extranjero, las noticias del ataque generaron una gran avalancha de apoyo de la comunidad de anime en todo el mundo.
Una campaña de GoFundMe, que comenzó cuando se publicó la noticia, recaudó casi US$100.000 en dos horas y un día después ya sumaba US$1,3 millones.
La misma fue iniciado por Sentai Filmworks, un distribuidor estadounidense de obras culturales japonesas. Y la gran mayoría de las donaciones han sido en pequeñas cantidades, de US$50 o menos.
"Esta compañía produjo muchos animes que me ayudaron a formar mi identidad. La mayoría de ellos eran obras maestras absolutas", escribió Darrian Harrison, uno de los donantes.
"Las obras de KyoAni han sido parte de mi infancia", coincidió LC Mendoza.
Mackenzie Haa, otra donante, dijo que Kyoto Animation "es un modelo para la industria del anime y se merece mucho más que esto. Espero que vuelvan más fuertes que nunca después de esta tragedia".
A través de Internet, los fanáticos están publicando mensajes de condolencia y apoyo en foros de discusión y foros.
Y aunque la mayoría de los tributos y preocupaciones fueron dirigidos directamente al personal que pudo haber perdido la vida, y sus familias, los aficionados también lamentan la potencial pérdida artística.
"Miles de dibujos, computadoras con archivos de animación importantes. Lo que sea que tengan actualmente en la ´tubería´ puede estar cerca o completamente destruido", escribió un usuario de Reddit, aunque otros argumentaron que deben existir copias de seguridad.
Otros publicaron enlaces a mensajes en los que miembros conocidos del estudio informaban estar a salvo. Pero otros mantienen listas con los nombres de los que todavía faltan.