Nuevamente tanques turcos cruzaron la frontera con Siria para acercarse a la ciudad kurdo-siria de Kobane este sábado, denunciaron varias fuentes, entre ellas el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos. La incursión ocurre en medio de una disputa entre las autoridades turcas y el autogobierno de Kobane por la construcción de un muro fronterizo.
Ya el viernes se habían producido violentas protestas que terminaron con la muerte de dos civiles (entre ellos un niño), aparentemente abatidos por las fuerzas de seguridad turcas. Las sentadas de los ciudadanos continúan, lo que ha obligado otras veces a retirarse a los tanques. Este sábado, los vehículos militares y un número indeterminado de soldados penetraron algunos metros en la región fronteriza para asegurar las obras.
El viceministro de Exteriores de la administración kurda de Kobane, Idris Nuaman, dijo a la agencia EFE que las fuerzas turcas entraron “varios metros” en la zona desde el paso fronterizo de Mursitpinar. “Los tanques y los vehículos turcos han accedido a una área del oeste de Kobane, después de que ayer (viernes) intentaran entrar en nuestro territorio y tuvieran que retirarse por la presencia de manifestantes, que se enfrentaron a ellos”.
Enfrentamientos y muertos
El responsable político recordó que desde hace una semana hay una sentada de decenas de civiles para evitar el paso de las fuerzas turcas. “Durante la jornada de hoy (sábado) no ha habido enfrentamientos, pero otros días, como ayer, sí”, indicó. No ha habido enfrentamientos entre las fuerzas kurdas y los turcos pues “tanto las Unidades de Protección del Pueblo (milicia kurdo-siria), como las ‘Asayish' (fuerzas de seguridad kurdas) están desplegadas lejos de Kobane”.
Por otro lado, el Ejército turco y las fuerzas del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) se han enfrentado en las provincias de Hakkari (cerca de Irak) y Van (cerca de Irán),dejando como saldo al menos 104 milicianos muertos o heridos, según reportes de las autoridades de Ankara, que reconoció además la muerte de 13 soldados. Se trata del mayor número de bajas en un solo día, como consecuencia del conflicto, de los últimos años.