AFP
Miles de tailandeses se congregaron este sábado ante el palacio real para rendir homenaje al rey Bhumibol, fallecido el jueves tras 70 años de reino que será seguido por un período de regencia.
El príncipe heredero Maha Vajiralongkorn, de 64 años, sorprendió el jueves al pedir un "plazo" antes de subir al trono, dejando de momento al país sin monarca.
El viernes un alto mando de la junta confirmó que según la Constitución del país, Prem Tinsulanonda, jefe del consejo privado de Bhumibol, iba a actuar como regente hasta que el príncipe subiera al trono.
Prem es un general retirado, que ejerció como primer ministro, y sigue siendo muy influyente, pese a sus 96 años.
Esta regencia "será temporal ya que por el momento el trono está vacante" declaró a la prensa el viceprimer ministro Wissanu Krea-Ngam.
Tras la muerte del rey, desde los deportistas hasta los empleados de las oficinas en el metro, todo el país se vistió de negro y blanco, los colores de duelo en Asia.
Este sábado todo el mundo buscaba comprar en los centros comerciales atuendos de color negro.
El rey, hospitalizado casi ininterrumpidamente desde hacía dos años, no había vuelto a aparecer en público desde hacía casi un año.
Bhumibol Adulyadej tenía un estatus de semidiós en Tailandia. Sus retratos son omnipresentes en todo el país y el culto a la personalidad del rey se reforzó todavía más desde el golpe de Estado militar del 22 de mayo de 2014.
