Sobrecogedores relatos de testigos del tiroteo en campus universitario de Oregon
Un nuevo tiroteo estremeció este jueves a Estados Unidos. En esta ocasión, a la población de Roseburg, una pequeña localidad del estado de Oregón, donde se encuentra el centro universitario Umpqua.
Un joven identificado por los medios como Chris Harper Mercer, de 26 años, abrió fuego contra estudiantes y personal del centro educativo y dejó al menos 10 muertos y siete heridos.
Algunos de los estudiantes que se encontraban en el edificio Snyder, donde ocurrieron los hechos, hablaron con distintos medios. Estos son sus testimonios.
"Corres tan rápido como puedes"
Brandy Winder, estudiante de 23 años que se mudó desde Portland a Roseburg hace apenas tres semanas, relató que estaba en una sala del edificio Snyder, adyacente al aula donde se produjeron los disparos.
"Oí al menos nueve disparos", le contó a la cadena CNN.
"Hay una puerta que conecta nuestra clase con aquella, y mi profesora iba a golpearla", narró Winder, "pero preguntó en voz alta, '¿están todos bien?', y entonces oímos muchos más disparos. Todos nos quedamos helados por un segundo".
"Oímos a gente gritar al otro lado", prosiguió el estudiante. "Y entonces todo el mundo huyó. Algunos saltaron sobre las mesas, tirando cosas a su paso".
Todas las aulas del edificio tienen puertas hacia el exterior, no hay pasillos.
"Conforme corríamos, creo que hubo más disparos pero mi cerebro estaba en modo de pánico, sólo concentrado en correr tan rápido como pudiera", precisó.
Mochilas como escudos
Cassandra Welding también estaba en un aula adyacente a la clase donde se produjo el tiroteo y contó que vio cómo un compañero abrió una puerta que conectaba ambas salas y recibió un disparo.
"Cerramos las puertas, apagamos las luces. Todos estábamos en pánico", recordó Welding en declaraciones al diario The Washington Post.
"Pusimos las mochilas al frente, sillas, cualquier cosa que pudiéramos, para protegernos en caso de que el atacante entrara".
Welding explicó que, desde su escondite,muchos de los estudiantes llamaron al teléfono de emergencias 911 o a sus padres para decir palabras de cariño porque no sabían qué iba a pasar, si estas iban a ser sus últimas palabras.
En conversación con la cadena CNN, Melody Boqua detalló que permaneció escondida junto con algunos de sus compañeros por más de una hora.
"Fue aterrador, se te pasan tantas cosas por la cabeza... recé, pensé en mi famila y amigos", dijo, y añadió que puso el teléfono a un lado para evitar hacer ruido o llamar la atención
Estudiante de enfermería
La joven Hannah Miles, de 19 años, estaba en clase de escritura cuando la profesora recibió una llamada de seguridad diciendo que el centro estaba en cierre de emergencia.
Oyó disparos en otra clase y la profesora y otros estudiantes se arremolinaron juntos en la clase bajo llave.
Oyeron pasos fuera y una voz masculina que gritaba: "¡Salgan, salgan!". Permanecieron en silencio y no abrieron la puerta.
Miles le contó a The Daily Beast que la policía llegó pronto. Y una vez que los estudiantes se convencieron de que eran agentes de policía, abrieron la puerta.
Ver a los agentes fue "como si les hubieran quitado un enorme peso de encima".
La estudiante de enfermería, en su primer año de estudios, dejó todo atrás: teléfono, cartera, bolso y libros.
"Era un caos completo, de terror y pánico", evocó al recorder cómo corría.
Por su parte, Kortney Moore le dijo a The News Review que el pistolero entró en el aula después de disparar a través de la ventana. Moore vio a su profesor recibir un disparo en la cabeza.
El atacante ordenó a todos sentarse en el suelo y posteriormente les fue diciendo que se pararan y dijeran cuál era su religión antes de abrir fuego.