Un sismo de magnitud 6,9 Richter afectó al área sur de California, Estados Unidos, la noche de este viernes, y es el segundo movimiento que afecta a la región en dos días.
El jueves otro sismo (6,4 Richter) se había registrado en el suroeste de Searles Valley, un área remota ubicada a unos 200 kilómetros de la ciudad de los Ángeles. Sismólogos habían advertido que un nuevo sismo de magnitud mayor podría afectar a la región. Desde ese día se registraron varias réplicas, la mayor de 5,4 Richter la mañana de este viernes.
El sismo de la noche del vierns es el mayor que se registra en la costa oeste en décadas. En 1994 uno de magnitud 6,6 Richter, con epicentro en Northridge, causó daños en infraestructura avaluados en miles de millones de dólares.
La USGS había informado inicialmente una magnitud 7,1 Richter para el sismo de la noche de este viernes, la que luego fue corregida a 6,9. En Chile el SHOA informó que el movimiento telúrico no reúne las condiciones necesarias para generar un tsunami en las costas de Chile.
Este movimiento, que se sintió con fuerza en la región de Los Ángeles, según constataron periodistas de la AFP, es 11 veces más fuerte que el anterior, según el USGS.
Estos sismos han despertado de nuevo el fantasma de "El Grande" (The Big One), un terremoto potencialmente devastador que se teme golpee en algún momento el oeste del país.
El epicentro del sismo de este viernes fue localizado a 17 kilómetros al norte-noreste de Ridgecrest, en el sur del estado de California.
Varias atracciones del parque Disneyland fueron cerradas para inspección, mientras que un partido de básquetbol de la NBA en Las Vegas fue suspendido por el temblor que causó que el marcador y varios parlantes se balancearan en lo alto de la cancha.
Lo que sí no se interrumpió fue el béisbol. El juego de los Dodgers de Los Ángeles continuó sin parar durante el sismo, que era captado por las cámaras en el estadio.
- "Ninguna búsqueda activa" de fallecidos -
Los servicios de emergencias ya estaban desplegados en la zona por el fenómeno del jueves.
El equipo de respuesta incluye unas 200 fuerzas de seguridad, así como helicópteros y aviones de carga, dijo el general de la Guardia Nacional de California, David Baldwin.
El portavoz del departamento de bomberos de San Bernardino, Jeremy Kern, dijo a CNN que no había "ninguna búsqueda activa en curso" de víctimas atrapadas, mientras que el jefe de bomberos del condado de Kern, David Witt, dijo que se habían señalado "solo heridas menores como cortadas y moretones".
En Los Ángeles, la policía y los bomberos no reportaron daños o heridos. El aeropuerto funciona con normalidad.
En redes sociales, usuarios publicaron videos del temblor, incluido uno que mostraba el agua de una piscina moviéndose frenéticamente.