Sierra Leona anunció el jueves un confinamiento de tres días de unos 2,5 millones de habitantes en la región de la capital, Freetown, y en el norte del país para hacer frente a la epidemia de ébola.
El peor brote del virus se ha cobrado la vida de casi 3.700 personas en este empobrecido país de África, una de las tres naciones cuyas economías se han arruinado y cuyos sistemas de salud están saturados a causa de la epidemia.
"El confinamiento se prolongará entre el 27 y el 29 de marzo y será similar al de septiembre" pasado, que fue impuesto en todo el país, declaró a la prensa el jefe del Centro Nacional de Lucha contra el Ébola (NERC), Palo Conteh.
"El gobierno y sus socios esperan que los casos latentes que de momento no están siendo reportados o remarcados sean visibles", agregó.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció el miércoles que desde diciembre de 2013 un total de 10.200 personas (3.700 de ellas en Sierra Leona) han muerto por ébola.