AFP
El presidente checo, Milos Zeman, reaccionó con entusiasmo a la idea propuesta por Ivana Trump, ex esposa de origen checo del presidente electo estadounidense Donald Trump, de convertirse en embajadora de Estados Unidos en Praga.
"Sería una elección excelente", declaró el presidente checo, que ya había mostrado su satisfacción por la victoria de Donald Trump, justamente él que quiere convertirse en el "Donald Trump checo".
Washington "no podría enviar a Praga una mejor embajadora", afirmó Zeman, en un comunicado publicado el miércoles.
"Si (Ivana) Trump lo desea y si el presidente Trump toma esta decisión, los vínculos entre Estados Unidos y la República Checa se verán reforzados", declaró por su parte el primer ministro Bohuslav Sobotka, en la radio pública CRo.
Ivana Trump, que nació en 1949 en Gottwaldov (hoy Zlin) en el este de la actual República Checa, confió recientemente al diario New York Post su intención de convertirse en embajadora en Praga.
"Sugeriré que sea designada embajadora en la República Checa", declaró el viernes, citada por el diario.
Según ella, su "dominio del idioma checo" y su "notoriedad en su país de origen", podrían suponer "grandes ventajas" para este puesto diplomático.
Exesquiadora de fondo y modelo, convertida en empresaria, Ivana Zelnickova se casó con Donald Trump en 1977, con el que tuvo tres hijos, Donald Jr, Ivanka y Eric. Se divorciaron en 1992.
Su nombramiento como embajadora en Praga sería "interesante", declaró por su parte a la AFP Tomas Prouza, secretario de Estado checo para los Asuntos Europeos.
Prouza recordó que "pocos embajadores estadounidenses en Praga habían sido diplomáticos de carrera".
La actriz de Hollywood "Shirley Temple Black fue, por ejemplo, una excelente embajadora de su país en Praga, durante la 'Revolución de Terciopelo' de 1989", precisó Prouza.
