Pocos temas han polarizado tanto estas elecciones como el tratamiento de las minorías étnicas en la retórica de los candidatos presidenciales estadounidenses.
En especial el aspirante republicano Donald Trump, quien le ha pedido a los latinos en general que voten por él porque supuestamente "no tienen nada que perder".
Si bien es cierto que los hispanos salen peor librados que el resto de la población en muchos indicadores de progreso social, la mayoría de los 57 millones de latinos en Estados Unidos tienen una vida que no se parece al cuadro apocalíptico que pinta Trump, de desempleo permanente, pobreza sin esperanza y violencia.
Incluso una pequeña minoría de latinos ha llegado a la cumbre socioeconómica del país, el llamado 1% de los más acomodados.
La mayor fortuna
El hispano que ha hecho una fortuna más grande con base en negocios en Estados Unidos se llama Jorge Pérez.
Nació en Argentina de padres cubanos, creció en Colombia y llegó a Miami en 1968.
Se metió en la industria de la construcción y hoy, gracias a su firma Related, especializada en edificios residenciales de lujo, es llamado el "rey de loscondominios de Miami".
La revista Forbes estima su fortuna en US$3.300 millones, ubicándolo en el puesto 239 en las fortunas del país.
Es también un magnate de la filantropía. Su nombre está en la fachada del Museo de Arte de Miami. La institución se llama oficialmente "Museo de Arte Jorge M. Pérez", luego que el empresario donara US$40 millones para su construcción.
Muchos en la dirigencia tradicional de Miami se quejaron cuando se anunció que el museo llevaría su nombre. No les parecía apropiado.
"En Estados Unidos cuando ves museos y otros edificios cívicos, ves el nombre Rockefeller, Carnegie o Guggenheim, pero nunca ves el nombre Pérez o Rodríguez", le dijo a BBC Mundo en una entrevista el pasado junio.
"Era muy importante para mí, personalmente y como representante de la comunidad hispana, que nosotros empezáramos a tener nuestros nombres en las fachadas de esas importantes instituciones cívicas. Eso quiere decir que estamos realmente volviéndonos parte de esta sociedad", agregó a BBC Mundo.
Imperio cervecero
La fortuna de Pérez se construyó en Estados Unidos. Pero en la lista de hispanos fabulosamente ricos, lo supera un apellido de origen colombiano, hecho famoso por un magnate cervecero del país sudamericano cuyos hijos son hoy los latinos más acaudalados de Estados Unidos.
Julio Mario Santo Domingo consolidó el imperio cervecero de Bavaria en Colombia antes de venderlo a SABMiller en 2005, en un negocio mediante el cual adquirió a su vez acciones de la multinacional que se han venido apreciando de manera sustancial.
El patriarca falleció en 2011, pero sus hijos, Alejandro y Andrés, nacidos y criados en Estados Unidos, son hoy cada uno dueños de una fortuna calculada por la revista Forbes en US$4.900 millones.
Esto los ubica en el puesto 111 de las personas más ricas de Estados Unidos.
Los Santo Domingo siguen teniendo importantes intereses económicos en Colombia, incluyendo la propiedad de un canal de televisión.
Pero su vida ha transcurrido en el jet set internacional. Alejandro se casó recientemente con una aristócrata británica descendiente del Duque de Wellington.
De reyes y ángeles
Los hermanos Jude y Christopher Reyes también están en la lista de megamillonarios en Estados Unidos. Forbes los ubica en el puesto 246 de los ricos de ese país, con recursos estimados en US$3.100 millones.
Estos estadounidenses de origen latino controlan una firma distribuidora de alimentos basada en Chicago, que incluye la mayor distribuidora de cerveza en el país.
Por su parte, Arturo "Arte" Moreno es reseñado como el primer mexicanoestadounidense en ser dueño de un equipo de béisbol de las Grandes Ligas.
El dueño de los Angels de California es un veterano de la guerra de Vietnam con una fortuna personal que sobrepasa los US$2.000 millones, según Forbes. Nació en Arizona, hizo dinero con una empresa de avisos de publicidad y hoy se le atribuye una fortuna entre las 400 más grandes del país.
El 1%
Las familias latinas anteriormente mencionadas están en la cumbre económica del país.
Y por supuesto, no son representativas de la gran mayoría de la población hispana que vive en Estados Unidos.
Información de la Oficina Federal del Censo de 2013 indicaba que el ingreso medio de una familia latina era de US$40.963 al año.
Para ser considerado parte del 1% más próspero de la sociedad estadounidense, se necesita un ingreso de US$380.000 anual.
Casi 1,4 millones de hogares estadounidenses, entre un total de 124 millones de hogares en todo el país, clasifican en esa categoría "dorada", de los cuales 82% son anglosajones y otro 7% son de ancestros asiáticos.
De lo que se desprende que los latinos y afroestadounidenses componen un poco más de 10% del total de esta élite, o sea unos 150.000 hogares.
Son las mayores historias de éxito económico, a la que aspiran los millones de personas que han llegado a este país en busca del "sueño americano".
