El presidente ruso, Vladimir Putin, calificó este sábado de "acto terrorista salvaje" el atentado de la víspera contra una sala de conciertos en Moscú, que dejó más de 100 muertos, y aseveró que los sospechosos detenidos quisieron huir a Ucrania.
En una alocución en televisión, Putin afirmó que los cuatro atacantes detenidos por este ataque habían intentado huir a Ucrania, y prometió que todos los responsables serán "castigados" y "no tendrán un destino envidiable".
Los sospechosos detenidos, dijo, "se dirigían a Ucrania donde, según los datos preliminares [de los investigadores] se había preparado una 'ventana' para que pudieran cruzar la frontera".
Putin respaldó así la versión expuesta poco antes por sus servicios de seguridad, el FSB. En ningún momento de su discurso mencionó la reivindicación del grupo yihadista Estado Islámico, difundida el viernes por la noche.
Ucrania a su vez ha desmentido cualquier implicación en el ataque.
Putin denunció el atentado como un acto de "terrorismo salvaje", y decretó una jornada de luto nacional el domingo, en su primera intervención desde el ataque, que causó al menos 115 muertos.
Hombres armados, cuatro, según las autoridades, abrieron fuego y luego incendiaron el Crocus City Hall, en la periferia de Moscú, justo antes de un concierto.