Privar a las mujeres de trabajar agravará la crisis económica de Afganistán (ONU)
Prohibir a las mujeres trabajar agravará todavía más la "catastrófica" crisis económica en la que se hundió Afganistán tras la retirada de las fuerzas occidentales y el regreso de los talibanes, indicó la ONU en un informe el miércoles.
La crisis económica y humanitaria en Afganistán "se agrava" y "hace falta responder para salvar las vidas" amenazadas por la pobreza y la hambruna, señala el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en sus "Perspectivas socioeconómicas de Afganistán 2021-2022", al que AFP tuvo acceso.
La economía del país más pobre de Asia, minada ya por la guerra y la sequía, perdió con el cambio de poder su principal recurso, la ayuda internacional, que representaba un 40% de su PIB y financiaba un 80% de su presupuesto.
"Un choque fiscal sin precedentes" a nivel internacional, indica el PNUD, al que se añaden las sanciones económicas contra los talibanes de los poderes occidentales.
Este programa de la ONU señala las consecuencias de las restricciones impuestas al trabajo de las mujeres por los talibanes, que solo autorizaron retomar sus funciones a una parte de funcionarias dedicadas a la educación o la sanidad.
"El trabajo de las mujeres constituye un 20% del empleo total y es vital para atenuar la catástrofe económica en Afganistán", explicó a AFP la directora de PNUD en Asia, Kanni Wignaraja.
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El PNUD estima que sin el empleo femenino, el Producto Interior Bruto de Afganistán se contraerá "del 3 al 5%", lo que equivale a entre 600 y 1.000 millones de dólares.
El daño "dependerá de la magnitud de las limitaciones impuestas", indicó.
La prohibición también tiene consecuencias indirectas: si las mujeres no trabajan, no tienen salario y no pueden consumir, lo que puede representar unos 500 millones de dólares de pérdidas anuales, añadió el PNUD.
En consecuencia, "todas las mujeres y todos los hombres capaces de trabajar deberían volver a su trabajo y dar lo mejor para atenuar el impacto económico inmediato y construir un futuro para el país", dijo su directora asiática.
Wignaraja consideró también crucial que las jóvenes afganas continúen yendo al colegio o al instituto, donde los talibanes interrumpieron las clases para mujeres, para que puedan ganarse la vida en el futuro.