El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, afirma tener el equivalente a 24 millones de euros de liquidez. Además, es propietario de más de cien empresas en varios países, incluida Rusia. La nueva ley de transparencia anticorrupción obliga a más de cien mil funcionarios del país a declarar su patrimonio. El presidente, además, publicó en Facebook sus propiedades y bienes de valor. El semanario Nowoje Wremja calcula su fortuna en 867 millones de euros, lo que lo convertiría en el cuarto más rico del país.
Su primer ministro, Volodymyr Groysman, declaró entre otras cosas 913.000 euros en efectivo y nueve relojes de lujo. El ministro del Interior, Arsen Avakov, por su parte, la posesión de tres apartamentos, uno de ellos de 657 metros cuadrados, una bodega con 750 botellas y una colección de arte y antigüedades que incluye una pintura original de Pablo Picasso.
El alcalde de la capital Kiev, Vitali Klitschko, incluye entre sus pertenencias siete bicicletas. También, activos por más de nueve millones de euros. El ex campeón de boxeo no incluye en su declaración las inversiones en empresas e inmuebles en el extranjero.
La nueva ley de transparencia no ha sido una iniciativa del gobierno de Poroshenko, sino una condición del Fondo Monetario Internacional para otorgar nuevos fondos a Ucrania. Con ello se pretende evitar la corrupción en un país cuyo salario mínimo mensual equivale a 51 euros. No es algo nuevo: muchos funcionarios de la antigua república soviética habían amasado fortunas. Y el propio Poroshenko aparecía en los Papeles de Panamá. Proporcionar información falsa está penado hasta con dos años de cárcel.
