Presidenciales francesas: Campaña sigue entre acusaciones de complots y traición
AFP
La campaña a la elección presidencial francesa subió de tono este viernes con acusaciones cruzadas: el candidato de derecha François Fillon acusó de "complot" al jefe del Estado y el socialista Benoit Hamon se siente traicionado por los suyos, que lo abandonan.
El presidente François Hollande, que no se presenta a la reelección y hasta ahora ha estado discreto en la campaña, replicó este viernes al denunciar la falta de "dignidad" y de "responsabilidad" de Fillon.
Fillon, de 63 años, intenta desde hace semanas salvar una campaña salpicada por las causas judiciales acusando al poder, a los jueces y a la prensa de buscar desacreditarlo.
El tono había subido el jueves cuando el candidato, que según los sondeos sería derrotado el 23 de abril por el centrista Emmanuel Macron y la aspirante de extrema derecha Marine Le Pen, denunció la existencia de un "gabinete negro" dirigido por el jefe de Estado que orquestaría desde el poder para perjudicarlo organizando filtraciones a la prensa.
"No quiero entrar en el debate electoral", respondió este viernes Hollande, en la radio pública, "no soy candidato, pero hay una dignidad, una responsabilidad que deben ser respetadas. Fillon está por debajo de ese nivel".
La semana pasada Fillon fue inculpado por desvío de fondos públicos en el caso de los supuestos empleos ficticios de su esposa, Penelope, y dos de sus hijos como asistentes parlamentarios. La investigación se ha ampliado por indicios de tráfico de influencias y estafa agravada.
El viernes por la noche, el candidato continuó su retórica afirmando en un mitin en Biarritz (suroeste) que "la única manera de salvar a la izquierda es matando a Fillon".
Al mismo tiempo, la radio estatal France Info reveló que Fillon recibió en 2009 cuando era primer ministro un reloj de más de 10.000 euros como regalo del empresario ítalo-suizo Pablo Victor Dana. Y que en 2013 recibió otro reloj del relojero suizo Rebellion.
Fillon lamentó, en declaraciones a la AFP, que la prensa mencione regalos que son del ámbito de su vida privada. Esto, luego de las revelaciones sobre los lujosos trajes que le obsequió un abogado.
En su declaración de intereses, Fillon declaró ser dueño de dos relojes de 12.000 y 15.000 euros.
Pablo Victor Dana confirmó a la radio haber obsequiado el reloj de manera "absolutamente desinteresada". También en declaraciones a la radio el relojero suizo precisó que el regalo fue un gesto "muy amistoso" y que no había ningún "sobrentendido".
Intento desesperado
Fillon, vencedor de las primarias de la derecha, llegó a ser el gran favorito de las encuestas haciendo de la probidad el tema clave de su campaña. El jueves justificó sus acusaciones sobre el "gabinete negro" al aludir a un libro escrito por dos periodistas centrado en los "secretos inconfesables" del mandato de Hollande.
Sus declaraciones fueron inmediatamente criticadas por la izquierda. Para el ministro de Defensa, Jean-Yves Le Drian, se trata de "una especie de intento desesperado para salir de una situación en la que (Fillon) está enredado".
Hasta ahora, los ataques contra el sistema, los "golpes bajos" y los "hechos ocultos" eran considerados como argumentos de la extrema derecha.
Entretanto, la derecha asiste impotente a los crecientes apoyos que recibe el joven candidato centrista Emmanuel Macron, muchos de ellos desde las filas socialistas, ya que es considerado por muchos como el mejor antídoto frente a la candidata de extrema derecha, Marine Le Pen.
Entre ellos figura Le Drian, sin duda el ministro más apreciado del actual gobierno socialista. Le Drian ha justificado su apoyo a Macron pues no quiere que la elección presidencial se reduzca "a una opción entre la extrema derecha y la derecha dura" representada por Fillon.
Para el ministro de Defensa, Macron "tiene la voluntad, el liderazgo, y ha creado un movimiento que congrega a más de 200.000 personas".
"Traición" entre socialistas
"No me esperaba tantas traiciones", se lamentó por su parte el candidato socialista, Benoit Hamon, vencedor de las primarias de la izquierda.
Hamon, del ala más radical del Partido Socialista, ha sido abandonado por varios ministros y dirigentes de su partido, que han emigrado hacia la candidatura de Macron.
Ello ha supuesto una traición a "una historia, a valores que nos representan, al lugar que debe ser el de la izquierda", se ha quejado Hamon.
El ex primer ministro Manuel Valls, derrotado por Hamon en la primaria socialista, se negó a apadrinarlo y ha criticado públicamente su programa. Un "comportamiento gravemente contrario al principio de lealtad", según la Alta Autoridad de la primaria, organizadora de la consulta.
En cabeza en intención de voto en la primera vuelta, Marine Le Pen, viajó este viernes a Moscú, donde se reunió con el presidente ruso Vladimir Putin. Este último aseguró que "Rusia no interferirá en la elección", según declaraciones citadas por las agencias de prensa.