Investigan nueva muerte por ébola en el norte de Sierra Leona
AFP
Sierra Leona anunció el fallecimiento de una mujer posiblemente a consecuencia del ébola, horas después que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara el jueves el final de la epidemia en África Occidental.
El portavoz del gobierno sierraleonés, Abdulai Bayraytay, y un alto responsable del ministerio de Salud, que pidió el anonimato, anunciaron a la AFP durante la noche una posible muerte por ébola en la ciudad de Magburaka, en el distrito de Tonkolili (norte).
Un primer análisis dio positivo al virus, pero deben llevarse a cabo más análisis. "Los resultados completos se harán públicos antes del viernes", explicó el responsable sanitario, quien precisó que la víctima sería una estudiante, la fecha de cuya muerte no indicó.
La mujer, que vivía habitualmente en Lunsar, en el distrito de Port Loko, enfermó en la localidad de Baomoi Luma, en el distrito de Kambia, cerca de la frontera con Guinea. A continuación, fue trasladada por vía terrestre a Magburaka, donde falleció.
Para llevar a cabo "investigaciones intensivas", un equipo formado por responsables sanitarios sierraleoneses, pero también por miembros de la OMS y del centro estadounidenses de control y prevención de enfermedades, fue movilizado, señaló Bayraytay.
La OMS había anunciado el jueves el fin de la peor epidemia de Ébola en África Occidental, al declarar a Liberia, el último país afectado, libre de la enfermedad que mató a más de 11.000 personas en dos años.
"Hoy, la Organización Mundial de la Salud declara el fin de la epidemia de Ébola en Liberia y afirma que todas las cadenas conocidas de transmisión en África Occidental cesaron", había indicado la OMS.
La organización internacional declaró Sierra Leona libre del virus el 7 de noviembre y a Guinea, el 29 de diciembre, al pasar 42 días desde que los últimos casos de ébola dieran negativo en el país.
Pero el riesgo de contagio persiste en algunos fluidos corporales de los supervivientes, como el esperma, donde el virus puede permanecer hasta nueve meses.
Liberia ya había sido declarada libre de ébola en mayo y en septiembre, antes de sufrir nuevos casos aislados.
Ban advierte de nuevos brotes
Esta epidemia, la más mortífera desde que se identificó el virus en el centro de África en 1976, comenzó en diciembre de 2013 en Guinea y se propagó rápidamente a las vecinas Liberia y Sierra Leona, los tres países más afectados, antes de golpear en menor medida a Nigeria y Malí.
El virus afectó en total a 10 países, incluidos España y Estados Unidos, y causó 11.315 fallecidos entre los 28.637 casos registrados.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, avisó el miércoles de que se prevén nuevos brotes "en los próximos años", aunque su alcance y su frecuencia "deberían disminuir con el tiempo".
"Debemos seguir comprometidos", dijo en Ginebra Peter Graaff, responsable de la respuesta al ébola en el seno de la OMS.
"Esta enfermedad no puede volver a destruirnos como lo hizo", aseguró el responsable de la célula liberiana de crisis antiébola, Francis Karteh. "Nuestros médicos y cuidadores no conocían [la enfermedad], por eso hubo muchos muertos entre ellos" (192 de los 378 contaminados).
"Quémenlos a todos"
En los peores momentos de la epidemia, los países más afectados temieron el colapso.
"Algunos días recogíamos más de 40 ó 50 cuerpos", recuerda en Liberia Naomi Tegbeh, una superviviente que se hacía cargo de los cadáveres más contagiosos.
El centro antiébola de la oenegé Médicos Sin Fronteras en Monrovia tuvo que duplicar su capacidad de acogida, pero en el punto álgido de la epidemia, se vio obligada a rechazar a varios pacientes por falta de sitio.
La enfermedad transformó la vida cotidiana en los países afectados, donde se pidió a los habitantes que evitaran cualquier contacto físico entre ellos y también con los muertos, provocando el rechazo de la población.
"La proclamación de hoy es una alegría pero no justifica ninguna celebración porque podríamos sufrir otras" epidemias, explicó un comerciante de Monrovia, Aminata Kanneh, de 32 años.
En octubre de 2014, las autoridades de Liberia emitieron una consigna única para los cuerpos de los fallecidos, fuera cual fuera el motivo de su muerte: "Quemadlos a todos".
Los Estados pobres de África Occidental, que se vieron superados por la crisis y cuyos servicios sanitarios quedaron diezmados, multiplicaron las medidas de excepción, como la puesta en cuarentena de regiones enteras.
Las poblaciones se rebelaron a menudo contra unas normas que consideraban autoritarias, debido en parte a la torpeza de los primeros mensajes de prevención, que advertían de una muerte casi ineluctable.
Médicos sin Fronteras pidió sacar lecciones de la crisis.
La movilización "no solamente se vio limitada por la falta de medios internacionales, sino también por la falta de voluntad política para desplegar rápidamente ayuda", destacó la presidenta de MSF, Joanne Liu.
La OMS anuncia el fin de la epidemia de Ébola en África Occidental