Poroshenko promete que no dejará que desestabilicen Ucrania
El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, aseguró este domingo que no permitirá desestabilizar la situación en el país y advirtió de que se opondrá por todos los medios legales a los planes que urden algunos políticos en Kiev y en Moscú para adelantar las elecciones ucranianas.
"Como presidente, recurriré a todos los medios legales a mi alcance para hacer frente a los intentos de desestabilizar la situación en el país y de destruir los primeros resultados conseguidos por las autoridades ucranianas" dijo Poroshenko en una intervención con motivo del Día de la Unidad de Ucrania.
El jefe del Estado denunció que "algunos políticos en Kiev y en Moscú" planean organizar en Ucrania "protestas artificiales y adelantar las elecciones". Arremetió con dureza contra los políticos ucranianos que sugieren renunciar a las zonas de las regiones orientales del país controladas por los separatistas prorrusos. "Esa estrategia no llevará a paz. El objetivo de Rusia no es (la región de) Donetsk o Lugansk. El objetivo de Rusia es toda Ucrania", recalcó el presidente ucraniano.
Poroshenko subrayó que Ucrania cumple los acuerdos de Minsk para el arreglo pacífico del conflicto en el este del país, pero recalcó que los avances en los aspectos políticos, incluidas las reformas constitucionales que darían una mayor autonomía las regiones rebeldes, están supeditados al progreso en materia de seguridad.
"Pese a que nos ha costado mucho, nosotros cumplimos los acuerdos de Minsk, y esto le ha permitido a nuestra diplomacia ganar la difícil batalla por prolongar las sanciones de todo el mundo a Rusia", agregó. Ucrania, dijo el presidente ucraniano, ha logrado convencer a sus socios occidentales de que todo avance en el arreglo político debe ser precedido por progresos palpables en los asuntos de seguridad.
La mayor exigencia de Kiev en esta materia es la recuperación del control del sector fronterizo con Rusia que actualmente se encuentra en manos de los separatistas prorrusos de las regiones de Donetsk y Lugansk. Según las autoridades ucranianas, a través de ese sector fronterizo los secesionistas reciben de Rusia armamento, combustible y todo tipo de pertrechos.