Una nueva noche de disturbios se vivió la madrugada de este miércoles en varias ciudades francesas, con enfrentamientos entre las fuerzas del orden y manifestantes contrarios a la decisión del presidente Emmanuel Macron de forzar la aprobación de un proyecto de ley que eleva la edad de jubilación de 62 a 64 años sin someterlo a votación en el Parlamento.
Durante las últimas horas, las fuerzas de seguridad francesas realizaron 128 detenciones: En París, 81 personas fueron detenidas, según fuentes policiales citadas por Franceinfo y BFMTV. Las autoridades estiman que unas 3.500 personas se concentraron en la capital gala.
Según detalle Europa Press, los sindicatos han organizado varias jornadas de protestas y paros desde enero en contra de la reforma de las pensiones, cuya aprobación parlamentaria forzó el Gobierno el pasado viernes, a costa de someterse este lunes a dos mociones de censura presentadas por la oposición en la Asamblea Nacional.
Macron rompe silencio ante creciente ira por reforma de pensiones en Francia
Los detractores de esta nueva ley han dejado claro que seguirán con las movilizaciones -para este jueves hay prevista un nuevo día de paros-, aunque las manifestaciones son ya prácticamente constantes y más espontáneas.
Pese a las quejas, el presidente francés, Emmanuel Macron, no contempla disolver la Asamblea Nacional, como le reclama ya parte de la oposición, o incluso remodelar el Ejecutivo encabezado por Elisabeth Borne, tal como le trasladó el martes en el Elíseo a los representantes de los partidos que sustentan al actual Gobierno en el Parlamento.
Cabe mencionar que dos de cada tres franceses, según los sondeos, y todos los sindicatos se oponen al retraso de la edad de jubilación para 2030 y al adelanto a 2027 de la exigencia de cotizar 43 años, y no 42, para cobrar una pensión completa.