Un pasajero de un vuelo de la aerolínea británica EasyJet que viajaba de vacaciones junto a su familia, tuvo que hacerse cargo de pilotar el avión en el que se encontraban para volar de Manchester a España.
Michael Bradley, quien resultó ser un piloto de la misma aerolínea, se ofreció a volar el avión para evitar un retraso de varias horas ante la ausencia del piloto que debía operar ese vuelo, consignó Manchester Evening News.
De hecho, fue él mismo quien anunció por altoparlantes que era piloto y que se haría cargo del vuelo para que saliese a tiempo desde Manchester. El momento fue grabado y compartido en redes sociales por uno de los pasajeros.
"Llamé a easyJet y dije 'hola, estoy parado en el terminal sin hacer nada. Ando con mi licencia (…) Tengo mi cédula de identidad. Me encantaría ir de vacaciones, así que si necesitan un favor, estoy aquí listo para hacerlo'", relató Bradley.
Y continuó: "38 segundos después, me llamaron de vuelta y dijeron 'por favor, por favor, por favorcito con una gran cereza arriba, ¿podrías pilotar el avión a Alicante?'".
Tras resolver el problema, un vocero de la empresa aclaró que el piloto encargado de manejar la aeronave con destino a Alicante tuvo que tomarse su día libre debido a que su vuelo sufrió un gran retraso en Francia, lo que influyó negativamente en las condiciones de la tripulación.
"Estamos agradecidos con uno de nuestros pilotos que viajaba de vacaciones […] y se ofreció para operar el vuelo", agregó el vocero, destacando que eso cumple con todas las regulaciones áreas, ya que Bradley tenía consigo su respectiva licencia y había descansado el tiempo necesario.
