Papa Francisco viaja a Lisboa para reunirse con jóvenes
El papa Francisco saldrá este miércoles (02.08.2023) hacia Lisboa, donde le esperan alrededor de un millón de jóvenes peregrinos llegados desde todos los continentes para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), evento mayor para una Iglesia católica en plena reflexión sobre su futuro.
Con once discursos y una veintena de actos, el programa de su 42º viaje al extranjero se anuncia cargado para el jesuita argentino, de 86 años, que hace dos meses se sometió a una importante operación en el abdomen.
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Su estilo directo y espontáneo le valió una fuerte popularidad entre los jóvenes, por lo que se espera que Jorge Bergoglio aborde en Lisboa temas importantes para esta generación, como lo son la guerra en Ucrania, la ecología o la justicia social, en momentos en que la Iglesia católica enfrenta el desafío de la secularización en Europa.
El avión del papa, que debe despegar de Roma temprano en la mañana, tiene previsto su llegada al aeropuerto militar de Lisboa a las 10H00 (09H00 GMT). Allí será recibido por el presidente portugués, el conservador Marcelo Rebelo de Sousa, con quien se entrevistará después en el Palacio de Belém.
Los organizadores esperan la participación de un millón de peregrinos en total, procedentes de más de 200 países, en esta semana de encuentros festivos, culturales y espirituales que arrancó el martes con la misa celebrada en un céntrico parque de la ciudad, ante una marea de fieles ya presentes.
En los últimos días, la capital portuguesa ha ido llenándose de coloridos grupos de fieles que portan banderas de todo el mundo por las calles de esta ciudad, tomada ahora por las JMJ.
El evento movilizará a 16.000 efectivos de seguridad, protección civil y urgencias médicas. Además, se han cerrado varias carreteras y estaciones de metro, lo que supone un desafío para esta ciudad de 550.000 habitantes que ya recibe numerosos turistas en periodo estival.
A menos de dos meses de que comience en Roma una asamblea destinada a abordar el futuro de la Iglesia, la JMJ actuará como barómetro sobre la posición de los jóvenes católicos hacia cuestiones como el trato a las personas LGTB+, el matrimonio de los sacerdotes o la posición de las mujeres.