Panamá concluye traslado a México de migrantes cubanos y anuncia deportaciones
AFP
La operación para el traslado a México de más de 3.000 migrantes cubanos que permanecían varados en Panamá concluyó este miércoles y a partir de ahora serán deportados si entran de manera irregular al país, anunció el Sistema Nacional de Migración.
El gobierno de Panamá "finalizó hoy (miércoles) la coordinación y operación para la salida por razones humanitarias de los migrantes cubanos que se encontraban varados en el país", dijo la institución migratoria.
Además, Panamá mantendrá cerrada su frontera con Colombia en la zona selvática de Darién, para impedir la entrada de migrantes cubanos y de otros países, que buscan llegar hasta Estados Unidos.
Por tanto, cualquier persona que entre de manera irregular a Panamá "será deportado y se ordenará el impedimento de entrada al territorio nacional", advirtió el gobierno panameño en un comunicado.
Según la autoridad migratoria desde el pasado 9 de mayo 3.161 cubanos fueron trasladados en 22 vuelos desde el país centroamericano a Ciudad Juárez, fronteriza con Estados Unidos, tras un acuerdo entre México y Panamá.
A ellos se suman otros 1.301 que fueron trasladados en marzo, para hacer un total de 4462 migrantes desplazados a México.
Pese al costo de la travesía y los peligros de la ruta a manos de traficantes de personas, los cubanos han llegado por miles a Panamá en los dos últimos años. La travesía inicia en la isla para continuar por Ecuador, Colombia, Centroamérica, México y Estados Unidos, su destino final.
En Panamá las autoridades no los detenían pese a entrar de manera irregular. Al contrario, eran atendidos y socorridos y se les permitía seguir su ruta hacia Costa Rica.
Sin embargo, Nicaragua y Costa Rica terminaron cerrando sus fronteras a estos migrantes, lo que condujo al gobierno panameño a hacer lo propio.
El gobierno panameño anunció también que con este último traslado también se cerró el albergue principal donde los cubanos se mantenían a la espera para proseguir su viaje.
El pasado 19 de mayo el director general del Sistema Nacional de Fronteras, Cristian Hayer, manifestó que tras el cierre de la frontera terrestre, unos 300 migrantes, la mayoría africanos, habían sido devueltos a Colombia.
Según Hayer, el ingreso de migrantes tras el cierre fronterizo "se ha dado en menor escala, casi mínimo", dijo Hayer.
La vicepresidenta panameña, Isabel De Saint Malo, pidió este mes a los países latinoamericanos implicados "una solución integral" para la migración de los cubanos y calificó de "contradictoria" la posición adoptada por Nicaragua y Costa Rica.