Por AFP
Una pareja estadounidense acusada de mantener cautivos a sus 13 hijos se declaró no culpable este jueves de varios cargos de tortura y abuso, mientras los fiscales aseguraban que sus malnutridas víctimas solo podían bañarse una vez al año.
Vestidos completamente de negro y esposados de manos y pies, David Allen Turpin, de 57 años, y su esposa Louise Anna Turpin, de 49, se mostraron tranquilos al declararse no culpables de los cargos en un tribunal totalmente repleto.
La Fiscalía acusó a los padres de “tortura” y “abuso físico y emocional severo”, y presentó un total de 38 cargos en contra de la pareja. Entre los cuales figuran, 12 por tortura, 12 por falso encarcelamiento, seis por abuso de menores y otros seis por abusar de un adulto dependiente. El último cargo es por acto lascivo sobre un menor, imputado a David Turpin.
El fiscal del condado de Riverside, Mike Hestrin, dijo que por todos los cargos, ambos enfrentarían hasta 94 años de prisión.
La fianza para ambos fue establecida en 13 millones de dólares.
Los Turpin fueron arrestados el pasado domingo después de que la policía de Perris, una pequeña localidad al sureste de Los Ángeles, respondiera a la llamada de emergencia de una joven de 17 años que consiguió escapar de su vivienda y llamó al servicio de emergencia.