AFP
Con un llamado a intensificar protestas, la oposición venezolana redobla esta semana la presión contra el gobierno de Nicolás Maduro, pese a que el máximo tribunal anuló su decisión de asumir las competencias del Parlamento, de mayoría opositora, tras un fuerte rechazo internacional.
"La intención del gobierno es desmovilizar al pueblo en su justo reclamo y parar la presión de la comunidad internacional, pero esto recién comienza", advirtió este domingo el vicepresidente del Legislativo, Freddy Guevara, en una declaración pública.
El diputado se refería a la marcha atrás que dio el sábado el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) quien es acusado por la oposición de servir al gobierno por las sentencias con las cuales se adjudicó las funciones de la Asamblea y retiró la inmunidad de los diputados.
Sin embargo, la oposición no quedó satisfecha con las aclaratorias y denunció que "el golpe de Estado" -como califica los fallos- continúa, por lo que llamó a intensificar las protestas desde esta semana para lograr superar la crisis política con elecciones.
Para el martes fue convocada una movilización hacia el hemiciclo en Caracas.
"Todos activos que la lucha por la libertad no va a parar hasta que se restituya el orden constitucional (...) Lucharemos por las elecciones que nos deben, las de gobernadores, las de alcaldes y las presidenciales para solucionar la crisis", expresó Guevara.
Los comicios presidenciales están previstos para diciembre de 2018, mientras los de gobernadores, que debieron realizarse a finales del año pasado, fueron pospuestos y aún no tienen fecha.
No obstante, pese al colapso económico y la baja popularidad de Maduro la oposición no ha logrado convocar grandes marchas, luego de que en septiembre y octubre de 2016 movilizara a cientos de miles de partidarios.
Presión internacional
La presión contra el gobierno también continuará esta semana en la Organización de Estados Americanos (OEA).
Un grupo de 13 países presentó un proyecto de resolución para ser debatido este lunes en el Consejo Permanente del organismo, a fin de declarar los dictámenes del TSJ como "una violación del orden constitucional".
Esto conllevaría el inicio de gestiones diplomáticas e incluso la suspensión del país. Maduro ha dicho que evalúa su permanencia en la OEA.
En tanto, el presidente de la Asamblea, Julio Borges, inició este domingo una gira por varios países de la región, según dijo para "rescatar el voto" con ayuda de otros Parlamentos.
Las decisiones del TSJ generaron un fuerte rechazo internacional y abrieron una fisura en el oficialismo, pues la fiscal general, Luisa Ortega, confesa chavista, las consideró una "ruptura del orden constitucional".
Ello obligó a Maduro a convocar una reunión de los podres públicos -a la que no acudió Borges-, en la que se pactó modificar las sentencias.
Tabaré, "freno a agresión"
Lejos de bajar las aguas, Stalin González, jefe de la bancada opositora, propuso iniciar el próximo martes un proceso para que el Legislativo destituya a los magistrados de la Sala Constitucional del TSJ, cuyas sentencias han recortado sucesivamente poderes a la Asamblea.
Uno de esos fallos, de enero de 2016, declaró en desacato a la cámara por no desvincular a tres disputados acusados de fraude electoral, por lo que todas sus decisiones son consideradas nulas .
Sin embargo, la politóloga Francine Jácome dijo a la AFP que "es poco factible que se logre (la remoción) porque el mismo tribunal se opondrá y depende de otras instancias del Estado controladas por el oficialismo".
Previendo que la presión internacional no se detendrá, Maduro afirmó este domingo que Venezuela "no se deja ni se dejará" agredir jamás por la OEA ni el Mercosur, que el sábado exhortó al país petrolero a garantizar la separación de poderes y a respetar el cronograma electoral previsto.
"Es lamentable que esos cancilleres de la Triple Alianza (Mecosur) no dijeran ni pio de lo que pasa en Paraguay y solo se dediquen a atacar a Venezuela", expresó en su programa televisivo dominical, refiriéndose a Argentina, Brasil y Paraguay.
El mandatario aseguró que el presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, tiene un "espíritu altruista" y puede pasar a la historia "como el presidente que frenó la agresión contra Venezuela" en ambos organismos.