ONU refuerza sanciones para frenar programa nuclear norcoreano
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó por unanimidad una resolución que endurece las sanciones contra Corea del Norte en respuesta a la última prueba nuclear llevada a cabo el 9 de septiembre pasado.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, aseguró que el Consejo tomó "una dura acción". La resolución de condena de la quinta prueba nuclear del país comunista quiere obligar a Pyongyang a abandonar su programa atómico cerrando algunas lagunas de anteriores sanciones, estableciendo prohibiciones de viaje y congelando los bienes de más personalidades y entidades norcoreanas.
La medida, negociada sobre todo entre Estados Unidos y China, prohíbe la exportación de materias primas como cobre, níquel, plata y cinc. La exportación de carbón y hierro sólo se permitirá si es "vital" para el pueblo norcoreano. En este sentido, la medida más ambiciosa es la imposición a partir de enero de un límite de 400 millones de dólares o 7,5 millones de toneladas anuales a las exportaciones de carbón de Corea del Norte, una de las principales fuentes de divisas para el régimen.
Se trata de la segunda ronda de sanciones impuestas contra el régimen de Kim Jong-un este año. En marzo, el Consejo de 15 miembros estableció duras sanciones económicas tras un test realizado en enero.
El Consejo de Seguridad de la ONU pretende con estas resoluciones impedir que el régimen de Pyongyang disponga de los medios económicos para conseguir las partes necesarias en la construcción de armas nucleares. Sin embargo, hasta la fecha las resoluciones no han tenido el efecto deseado.
Tras la prueba realizada en septiembre, los diplomáticos en Nueva York han necesitado meses para consensuar el nuevo paso a dar. Sobre todo China, socio comercial de Corea del Norte, se opuso a la medida. Sin embargo, en esta ocasión Pekín también criticó abiertamente el ensayo, en una muestra del enfriamiento que viven las relaciones entre los dos países.
Con vistas al comercio y las finanzas, las nuevas medidas imponen la prohibición de compra a otros países de estatuas y helicópteros de Corea del Norte. La nación está considerada exportadora de estatuas como las que vendió al presidente congoleño Joseph Kabila y las dos estatuas del presidente de Zimbabwe, Robert Mugabe, quien pagó cinco millones de dólares por esos monumentos, que se erigirán después de su muerte.
Además, la élite pudiente del empobrecido país también se ha convertido en uno de los objetivos de las sanciones. Se han declarado objetos de lujo que no pueden ser vendidos a Corea del Norte, alfombras cuyo valor superen los 50 dólares o vajilla de porcelana cara. Asimismo se insta a los 192 países de la ONU a limitar a su representación diplomática y la cifra de sus billetes en el país.