El hallazgo del cuerpo sin vida de Olivia, una niña de seis años, ha conmocionado a toda España.
El pasado 27 de abril, ella y su hermana de solo un año, Anna, habían desaparecido en Tenerife cuando estaban junto a su padre, Tomás Gimeno, de 37 años, quien debía entregarlas a su ex esposa, Beatriz Zimmermann, tras pasar una tarde junto a ellas.
Las niñas nunca volvieron a casa, por lo que se realizó una denuncia para ubicarlas. La madre tenía esperanzas de que estuvieran con vida.
A raíz de lo mismo, se inició una investigación para dar con el paradero de las menores de edad y durante este jueves, el buque oceanográfico “Ángeles Alvariño” dio con el cuerpo de Olivia a una profundidad de 1.000 metros en las costas de Tenerife y, junto con eso, se han revelado más detalles del brutal crimen.
Olivia y Anna: el trágico desenlace en el caso de dos niñas desaparecidas en España
Según consignó ABC, la nave encontró dos bolsas de lonas que habían sido amarradas a un ancla de la lancha de Tomás Gimeno. En una de ellas estaba el cuerpo de Olivia, pero la otra estaba vacía.
Por lo mismo, en la zona se siguen realizando labores para dar con el cuerpo de la pequeña Anna.
Otro de los antecedentes que se ha puesto sobre la mesa es la hipótesis de la Guardia Civil en torno a que Tomás Gimeno habría drogado a sus hijas antes de amarrarlas al ancla y lanzarlas al mar.
Cabe mencionar que, durante la noche del 27 de abril, y luego de zarpar en dos ocasiones sin la compañía aparente de sus dos hijas, una patrulla del Servicio Marítimo de la Guardia Civil lo fiscalizó por haber transgredido el toque de queda y por sospechas de que podía estar vinculado al narcotráfico. Sin embargo, no hallaron ningún tipo de sustancia ilícita al interior de la lancha.
Pero de acuerdo a lo recogido por El Periódico, el organismo habría hecho una inspección del domicilio del sujeto y encontraron varios blíster de pastillas vacíos; éstas principalmente eran pastillas de lorazepam, el cual es comercializado como Orfidal o Ativan, una droga de alta potencia.
Sobre lo mismo, esta droga posee propiedades que contemplan ser un ansiolítico, amnésico, sedante e hipnótico, anticonvulsivo y relajante muscular.
Por lo pronto, aún no se ha confirmado oficialmente que Tomás Gimeno haya drogado a Olivia y Anna antes de arrojarlas al mar.
Eso mientras que las labores de búsqueda perduran en la zona, a la espera de novedades y seguir esclareciendo aún más el brutal crimen.