Miles de bomberos luchan contra los incendios forestales que se han desatado en Portugal, España y el suroeste de Francia, en medio de una ola de calor en dicho continente.
En estos últimos 9 días, las máximas fueron desde los 39 y 45 grados en España, dejando en total 510 personas fallecidas por las altas temperaturas.
Según consignó EFE, con datos emanados desde el Instituto de Salud Carlos III, en los siete primeros días de la ola de calor -del 10 de julio hasta el sábado 16- murieron 510 personas. 150 de ellas el sábado y 123 el viernes.
En el caso de Portugal, 659 personas han muerto durante los últimos siete días. Según confirmó el Ministerio de Salud en la noche del sábado 16 de julio, se trata en su mayoría, de personas de avanzada edad.
El jueves 15 de julio en este útlimo país se registró el peak de muertes: El número llegó a los 440 fallecimientos, cuando las temperaturas superaron los 40 °C en varias zonas y llegaron hasta los 47 °C en el distrito portugués de Viseu.