El principal sospechoso tras la desaparición de Madeleine McCann, Christian Brueckner, habría estado involucrado en un plan para secuestrar a la niña en Praia da Luz (Portugal), donde desapareció la menor británica, sólo una semana antes del hecho.
Esta versión surgió a raíz de un nuevo testimonio, quien señaló que la idea era vender la niña a “una pareja alemana que no podía tener hijos”.
Ken Ralphs, un hombre británico de 59 años, dijo a los medios que Brueckner intentó convencer a un amigo de ambos para que lo ayudara con el secuestro, según publicó el jueves el diario británico The Sun.
De acuerdo con la publicación, el plan era capturar a una niña de familia adinerada para poder venderla a una familia que no podía tener hijos, características que coinciden con la desaparición de Maddie.
Según el testimonio, el sospechoso sabía que su amigo “era vulnerable y que quería viajar al extranjero, pero que no podía hacerlo porque no podía pagar los billetes de avión”.
“Estábamos sentados alrededor del fuego una noche después de una comida, tomamos unas cervezas y durante las primeras horas de la mañana mi amigo comenzó a llorar”, contó el hombre a Sky News.
Al verlo le preguntó qué pasaba, ante lo que el hombre confesó que “se estaba involucrando con Christian (Brueckner) para secuestrar una niña de Praia da Luz a una familia rica”.
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Ralphs calificó la idea de “ridícula” y lo instó a dejar el plan de lado, pensando que era sólo para pedir rescate.
Sin embargo, el sujeto le explicó que no se trataba de una extorsión por dinero, sino que el sospechoso “tenía un cliente, un comprador en fila, una pareja alemana que no podía tener hijos”.
Ralphs se encontraba en Reino Unido cuando supo de la desaparición de Maddie, apenas una después de la conversación que tuvo con el presunto involucrado.
Según expresó, acudió a las autoridades para contar lo que sabía. “Le dije a la Policía, aquí está el mapa secreto de cómo llegar a este punto en el bosque. Le dije que debía enviarse inmediatamente a la policía portuguesa”, señaló, pero la Policía acogió su denuncia.