A pocos días de que se cumplan diez años de la desaparición de Madeleine McCann, acontecida el 3 de mayo de 2007, una niñera que cuidó a la pequeña en el resort portugués Ocean Club rompíó el silencio, aunque manteniendo su identidad en reserva.
En entrevista con el diario británico The Mirror, la mujer rememoró que la pequeña era la favorita de todas sus compañeras de trabajo: "recuerdo su carácter y temperamento. Era ligeramente tímida, muy dulce".
La niñera trajo a su memoria que el lugar donde se alojaban era tan inseguro que sus jefes le prohibían salir de noche en solitario por temor a que fueran violadas y revivió el paso a paso de los primeros minutos de la desaparición de Maddie, a quien no le tocaba cuidar esa jornada.
"Un padre se me acercó y me dijo que estaba ocurriendo algo. Que alguien estaba buscando a su hijo. No pensé que pudiera ser Maddie", relató, agregando que minutos después pudo ver a Kate (la madre) llorando desconsolada. Al acercarse, supo lo que había ocurrido. "Se la llevaron", eran las palabras que la primogénita de la niña le repetía mientras ella intentaba tranquilizarla.
De acuerdo a la mujer, pasaron 90 minutos hasta que llegara la policía al recinto turístico, momentos en que la madre "lloraba, pero casi en un estado catatónico. Y Gerry (el padre) estaba muy angustiado. Eso es lo que recuerdo de él, buscando debajo de los automóviles. No puedo olvidar eso. Nos dijeron que comenzáramos a buscar en tarros de basura en caso de que su cuerpo estuviera en alguno. En ese punto, nos dimos cuenta de que era algo serio".
Luego de un rato buscando dentro del Ocean Club, la niñera acompañó a la familia y a otros empleados a realizar un rastreo por las calles de Praia da Luz.
Una vez con la policía en el resort, ésta le pidió a cada uno de los empleados que estaban allí realizar una línea de tiempo para conocer qué hizo cada uno y buscar incongruencias en los relatos. La niñera llenó cuatro páginas con su historia.
Y cuando a la babysitter le consultaron si creía que los padres habían tenido algo que ver con la desaparición de la pequeña niña, ella fue muy clara: "Les dije que no, en absoluto. En primer lugar, por los tiempos, y en segundo lugar, dónde estaban, sus reacciones, todo. No hay opción de que hayan sido".
De esta manera, la niñera está convencida de que no hay "ninguna posibilidad" de que los McCann tuvieran algo que ver con la tragedia, una visión respaldada por el ex inspector detective Dave Edgar, quien investigó en privado el caso y quien está seguro de que la niña fue secuestrada por un motivo sexual. El secuestro fue meticulosamente planeado según este investigador privado.
