Al menos 18 personas, entre ellas muchos civiles, murieron el martes en Pakistán cuando un pequeño avión de la Fuerza Aérea paquistaní se estrelló en una zona residencial de Rawalpindi, ciudad gemela de Islamabad, indicaron los socorristas.
Las personas muertas son los cinco tripulantes del avión y 13 civiles, dijo Farooq Butt, portavoz de los servicios de rescate, que dio cuenta de una docena de heridos. El balance anterior era de 17 muertos.
"Los cuerpos están calcinados, lo que impide la identificación. Todos fueron trasladados al hospital militar para efectuar un análisis de ADN", agregó.
El accidente se produjo en plena noche en una localidad pobre de la periferia de la ciudad de Rawalpindi, donde se encuentra la sede del poderoso ejército paquistaní. La zona fue rápidamente acordonada por las fuerzas de seguridad, mientras decenas de ambulancias llegaban al lugar.
Las Fuerzas Armadas precisaron en un comunicado que se trataba de un avión de entrenamiento que realizaba una "misión de formación de rutina" en el momento del accidente, y confirmó que a bordo iban cinco miembros de la tripulación, dos de ellos pilotos. Los heridos fueron trasladados a hospitales y el incendio quedó sofocado.
De los restos del avión y las viviendas destrozadas aún se elevaba una columna de humo, constató un periodista de la AFP presente en el lugar. En un tejado cercano podían verse piezas del avión.
Una multitud de habitantes se concentró en el lugar, algunos de ellos llorando, como un anciano con barba blanca y el torso cubierto de vendas, Kala Khan, quien gritaba "¡Oh, mi hijo! ¡Mi hijo!", mientras otros habitantes intentaban consolarlo por la muerte de su hijo en el accidente.
Un residente contó a la AFP que el accidente se produjo alrededor de las 02H00 locales.
"Estaba durmiendo cuando el ruido de una enorme explosión me despertó. Salí de mi casa y vi unas llamas enormes. Corrimos hasta el lugar, la gente estaba gritando", relató a la AFP Mohamad Sadiq, un vecino de la zona de unos 50 años.
"Los lugareños intentamos ayudarlos pero las llamas eran demasiado altas y el fuego demasiado intenso, así que no pudimos hacer nada. Entre los muertos hay siete miembros de una misma familia y la mayoría fallecieron por las quemaduras", añadió.
"Me desperté cuando el avión pasó por encima de mi habitación y ya estaba en llamas en el aire. El ruido era aterrador", afirmó por su parte otra residente, Ghulam Khan. "Después cayó sobre una casa en la que vivía una familia", añadió.
Pakistán registró varios accidentes de aviación en los últimos años, tanto de aviones como de helicópteros.
En 2016, un avión de la compañía Pakistan International Airlines quedó envuelto en llamas después de que una de sus dos turbohélices fallara mientras viajaba de una zona remota del norte de Pakistán a Islamabad, provocando la muerte de más de 40 personas.
La catástrofe aérea más mortífera en suelo paquistaní fue en 2010, cuando un Airbus 321 operado por la compañía privada Airblue que había despegado de Karachi se estrelló en unas colinas a las afueras de Islamabad, con saldo de 152 muertos.