La alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y ex presidenta, Michelle Bachelet, dijo estar "horrorizada" por el brote de violencia en el noroeste de Siria y pidió que se creen corredores humanitarios, según anunció dicha institución este martes.
Bachelet instó al gobierno sirio y a sus aliados, que desde diciembre llevan a cabo una ofensiva, para recuperar el control del último gran bastión de los yihadistas y rebeldes, que "autoricen corredores humanitarios" para facilitar "el paso de civiles en toda seguridad".
"Ningún refugio es seguro. Y como la ofensiva del gobierno continúa y la gente se encuentra a la fuerza en zonas cada vez más pequeñas, temo que otras personas sean asesinadas", señaló.
Según el comunicado, la alta comisionada estaba "horrorizada" por el desarrollo de la crisis humanitaria en la región del noroeste de Siria, que incluye a la provincia de Idlib y parte de Alepo.
"Cómo puede alguien justificar tales ataques indiscriminados e inhumanos", cuestionó Bachelet.
Consultado por la AFP, su portavoz Rupert Colville explicó que los corredores humanitarios deben ante todo permitir a "los civiles que lo deseen" abandonar las zonas de conflicto.
La ONU denunció el pasado lunes que la ofensiva en el noroeste de Siria ha provocado la huida de 900.000 personas, en su mayoría mujeres y niños, desde que comenzó en diciembre.
Bachelet se dijo "alarmada por el fracaso de la diplomacia" frente a la crisis siria, y consideró que "debería anteponer la protección de los civiles a cualquier victoria política o militar".
"Condeno en los términos más enérgicos la persistente impunidad en las violaciones del derecho internacional humanitario cometidas por los diferentes partes en conflicto", subrayó.
Iniciada en marzo de 2011 con la represión de manifestaciones pacíficas, la guerra de Siria ha causado más de 380.000 muertos.
