Los diarios españoles La Vanguardia y ABC aseguraron en sus ediciones digitales de este martes que Juan Carlos I, rey emérito de ese país, se encontraría en República Dominicana, donde pretendería quedarse algunas semanas. El padre de Felipe VI anunció su decisión de salir del país en medio de investigaciones de las fiscalías de España y Suiza por un escándalo de corrupción.
Ambos medios aseguran que Juan Carlos abandonó el Palacio de la Zarzuela el domingo y pasó la noche en Sangenjo (Sanxenxo), un lugar que frecuentaba para practicar una de sus aficiones, la vela. Desde esa localidad cercana a Pontevedra habría viajado en auto el lunes por la mañana hasta la ciudad portuguesa de Oporto, un trayecto que toma poco más de dos horas.
Desde el aeropuerto de Oporto-Francisco Sá Carneiro embarcó rumbo a República Dominicana, siempre según la versión de estos medios. El diario ABC asegura que "lo más probable es que el rey padre haya aceptado alguna de las muchas invitaciones que ha recibido de parte de sus amigos, conocedores del amargo momento que está viviendo”. Al país caribeño habría ingresado a través del aeropuerto de Santo Domingo.
A disposición de la fiscalía, dice
La Vanguardia asegura que Juan Carlos se alojará en el complejo hotelero Casa de Campo, ubicado a 125 kilómetros al oriente de la capital dominicana y que es propiedad de Pepe Fanjul, un amigo del rey emérito. El periódico dominicano Diario Libre se contactó con la embajada española, cuyos funcionarios aseguraron no haber recibido "ninguna información de un estamento oficial español sobre ese supuesto viaje”.
Otros medios reportaron previamente que Juan Carlos había viajado a la localidad costera de Cascais, en Estoril (Portugal), donde vivió parte de su infancia. Aunque en el comunicado oficial donde informa su decisión de dejar territorio español no especificó hacia qué país pretendía dirigirse, el monarca sí explicó que está a disposición de la fiscalía "para cualquier trámite o actuación que considere oportuna”.
