Un médico chileno fue acusado de negligencia tras la muerte de una de sus pacientes luego de realizarse una lipoescultura en España.
La víctima, identificada como Sara Gómez, acudió a la clínica de Cartagena, en Murcia. Tras el procedimiento, habría contado a su pareja que todo salió bien pero que perdió sangre y líquidos en cantidades importantes, por lo que debía ser estabilizada.
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Cabe destacar que el cirujano en cuestión, el nacional Javier Masso, es especialista en temas cardiovasculares, más no en estéticos.
Tras el traslado de Gómez al Hospital General San Lucía, Masso habría explicado que era una "medida preventiva", según indicó Las Últimas Noticias.
En el recinto de salud, donde estuvo 29 días internada, los profesionales encontraron múltiples perforaciones y lesiones en el riñón, en el hígado, el duodeno, el colon y en el intestino, las que finalmente provocaron la muerte de la mujer de 39 años casi un mes después de su operación.
Masso fue detenido y posteriormente liberado, pero con prohibición de salir del país ibérico y sin pasaporte.
