El Congreso de Perú debatió acaloradamente este viernes la destitución del presidente Martín Vizcarra, en un juicio político que tuvo en vilo al país en medio de la pandemia del coronavirus y la recesión económica.
El Presidente peruano superó un juicio político que buscaba dejar el cargo como “vacante”. La opción para destituirlo sumó 32 votos en el congreso, necesitando 87 para lograr la destitución.
Vizcarra fue acusado de instar a dos asesoras a mentir en una investigación sobre los contratos de un cantante, según unos audios filtrados hace ocho días. Esto llevó al Congreso a abrirle un juicio de destitución por "incapacidad moral".
Quienes apoyaron la opción de mantener al Presidente Vizcarra en su puesto, lo hicieron argumentando que no se puede provocar una crisis política en medio de una crisis sanitaria, por lo que optan por realizar una investigación de las acciones del mandatario sin removerlo del cargo.
Sin partido político ni bancada en un Congreso controlado por una oposición populista, Vizcarra ahora estará obligado a tender puentes y evitar nuevos choques con el Parlamento.
A 10 meses del fin de su período, Vizcarra pudo tener un destino parecido al de su predecesor, Pedro Pablo Kuczysnki (2016-2018), quien no pudo culminar su mandato al verse forzado a dimitir por presiones del Parlamento.