AFP
El mandatario venezolano, Nicolás Maduro, informó este viernes que llamó a consultas a su embajador en Brasil tras la suspensión de Dilma Rousseff de la presidencia.
"Le pedí al embajador nuestro en Brasil, Alberto Castelar, que se viniera hasta Caracas y me he reunido con él, junto a la canciller (...) y estuvimos evaluando está dolorosa página de la historia de Brasil otra vez", dijo Maduro en una cadena de radio y televisión.
El jueves, el gobernante venezolano prometió tomar medidas para impedir que la oposición, fuerza mayoritaria en el Parlamento, atente contra su gobierno al rechazar el "golpe de Estado" contra Rousseff.
Maduro promete medidas para neutralizar posible maniobra opositora como en Brasil
Acusada de maquillar de las cuentas públicas, el Senado decidió el jueves apartar a Rousseff del poder por un máximo de 180 días, mientras dure su juicio. Si es hallada culpable, Michel Temer completará su mandato.
Maduro advirtió que la suspensión de Rousseff "va a afectar" al Mercosur, cuya presidencia asumirá Venezuela dentro de un mes.
El nuevo gobierno brasileño, por su parte, rechazó las críticas de Venezuela y otros países como Cuba, Bolivia, Ecuador y Nicaragua, que rechazaron la salida de Rousseff
Maduro, un aliado político de Rousseff, acusó al mandatario estadounidense, Barack Obama, de estar "detrás del golpe" en Brasil e intentar "acabar con las corrientes progresistas en América Latina".
El mandatario venezolano, así como su antecesor Hugo Chávez (1999-2013), forjaron amplios lazos comerciales y políticos con los gobiernos tanto de Rousseff como del expresidente brasileño Lula da Silva, todos de izquierda.