Luisiana sufre este jueves el fuerte azote del huracán Laura, que se debilita a medida que se adentra en el continente americano, dejando destrucción e inundaciones, tras impactar en la madrugada con vientos de 240 kilómetros por hora.
De acuerdo a lo recogido por CNN, esta tormenta tiene una potencia “nunca antes vista” y es la más fuerte registrada en la región en más de 160 años, siendo equiparable con un huracán ocurrido en 1856, el cual también alcanzó vientos de 240 kilómetros por hora al tocar tierra.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) informó en su boletín que Laura se desplazaba dentro de Luisiana a 24 kilómetros por hora con dirección norte, como huracán de categoría 2 con vientos sostenidos de 160 kilómetros por hora con rachas más fuertes.
Se espera que el Huracán, que tocó tierra en Cameron en la madrugada como potente huracán categoría 4, se debilite rápidamente y se degrade a tormenta tropical más tarde en la jornada.
Laura obligó a evacuar a centenares de miles de personas en Luisiana y Texas, estados del sur de Estados Unidos, ante la perspectiva de "catastróficas" crecidas, fuertes vientos y lluvias.
Los videos publicados en Twitter por el "cazador de tormentas" Reed Timmer dan testimonio de la violencia de los vientos, que rompieron las ventanas de varios edificios en el centro de Lake Charles, un pueblo de Luisiana conocido por sus refinerías de petróleo, principal recurso de la economía de la región.
En tanto, más de medio millón de abonados carecían de energía eléctrica en la mañana en Luisiana y Texas, indicó el sitio PowerOutage.us.
"La amenaza que impone Laura a Luisiana continúa. Quédense en casa, y sigan las instrucciones y advertencias de las autoridades locales", dijo en Twitter el gobernador del estado, John Bel Edwards, quien indicó que una niña murió debido a la caída de un árbol sobre su casa en la zona de Leesville.
Estragos
El NHC advirtió sobre el aumento de las aguas en su camino hacia el norte, rumbo a Arkansas, a donde debe llegar la noche de este jueves.
"Marejada ciclónica catastrófica, vientos extremos e inundaciones repentinas están sucediendo en partes de Luisiana", indicó el NHC.
Agregó que sumadas a la marea alta, esas marejadas -que se espera penetren unos 65 kilómetros tierra adentro- podrían causar una crecida de las aguas de entre 4,5 y 6 metros por encima del nivel normal.
"Pasarán varios días después del paso de la tormenta para que las aguas retrocedan", señaló.
Asimismo, se producían fuertes lluvias que según los pronósticos podrían llegar a entre 130 y 250 milímetros, con algunos peaks de casi 400 milímetros en el oeste de Luisiana y el este de Texas.