Los retratos oficiales de Bill Clinton y George W. Bush, expuestos hasta ahora en el hall de ingreso a la Casa Blanca, donde Donald Trump podía verlos diariamente, fueron retirados para ser ubicados en una sala poco visitada de la residencia presidencial, afirmó el viernes la CNN.
Según la cadena estadounidense, que cita a varios testigos, los predecesores de Trump fueron remplazados en el sitio de honor por dos presidentes republicanos que fueron electos hace más de un siglo, William McKinley, asesinado en 1901, y su sucesor Theodore Roosevelt.
Existe una tradición en la Casa Blanca según la cual los retratos de los jefes de Estado más recientes del país estén expuestos en los mejores lugares para que sean vistos por los invitados a los actos oficiales.
Así los pudo apreciar el 8 de julio el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador.
Pero luego las fotografías de Bill Clinton (demócrata, presidente entre 1993 y 2001) y George W. Bush (republicano, presidente entre 2001 y 2009) fueron desplazadas a un comedor al que por lo general no ingresan los visitantes más notorios.
Interrogada por la AFP, la Casa Blanca no había reaccionado hasta entrada la noche del viernes.
CNN destaca que el presidente Trump tenía ocasión de ver los retratos de sus dos antecesores varias veces al día, cuando bajaba de su residencia privada o cuando recibía a sus visitantes en el hall de ingreso.
El retrato de Barack Obama, a quien Donald Trump sucedió en 2017 y a quien ha acusado de todos los males, incluidos "crímenes", no debería poder ser visto por el público durante una ceremonia oficial que Trump proyecta para antes de la elección presidencial de noviembre.