[VIDEO] Expertos alertan que los químicos del tabaco pueden llegar a zonas libres de humo
Un gran número de científicos ha alarmado sobre los productos químicos residuales que el humo del tabaco —llamado "humo de tercera mano"—, deja en las superficies interiores.
La investigación demostró que tales residuos potencialmente peligrosos pueden ser absorbidos a través de la piel, ingeridos e inhalados meses e incluso años después de que el humo se haya disipado.
De acuerdo a The Washington Post, un estudio publicado este año mostró que el "humo de tercera mano" aumenta el riesgo de cáncer de pulmón en ratones. El año pasado se publicó otro estudio que mostró un mayor riesgo de daño hepático y diabetes en ratones. Un tercer estudio publicado este año se centró en los casinos y mostró que seis meses después de que se prohibiera fumar, quedaron residuos de humo denso en las paredes y la alfombra.
El último estudio fue publicado este miércoles en la revista Science Advances, donde se muestra cómo el humo del aire exterior puede filtrarse a una sala no fumadora y cubrir sus superficies, y cómo esos químicos peligrosos pueden encontrar la forma de llegar al aire y circular por edificios en los que nadie ha fumado.
En el estudio se descubrió que el humo del tabaco puede ingresar a los espacios interiores y aferrarse a las superficies. Especialmente en el verano, cuando se usa aire acondicionado, las sustancias químicas no solo se vuelven a transportar al aire sino que también se pueden propagar fácilmente a través del sistema de ventilación de los edificios.
Otra cosa de la que los investigadores están seguros es que los productos químicos del humo del tabaco muchas veces permanecen en la ropa, en las superficies e incluso en la piel.