La sorprendente y efímera mariposa púrpura que come carne
La Tornasolada (Apatura Iris) es una de las mariposas más escurridizas de Gran Bretaña, y su belleza esconde algunos hábitos espantosos.
Se alimenta de carne y heces en descomposición, lo que hace que en los bosques de Inglaterra, en el mes de julio, se pueda ver a aficionados acarreando cosas como pañales sucios o pescados descompuestos para atraer a este enigmático insecto.
"Nunca olvidas tu primera vez", dice el entusiasta de las mariposas Neil Hulme.
"Mi padre y yo estábamos caminando por el bosque y nos encontramos con una mujer de unos 30 años, agachada. Y unos hombres vestidos de tweed, con cámaras y grandes objetivos, la estaban fotografiando por detrás".
Cuando se acercó, se dio cuenta de que le estaban sacando fotos a la mariposa que se había posado en su trasero.
Hulme se quedó cautivado por la criatura, sobre todo cuando echó a volar y se posó en su cuello.
"Los paparazzis de la mariposa me rodearon", recuerda. "Con un optimismo ciego, saqué mi mano como haría un halconero, y la mariposa se posó en mi dedo. Fue una experiencia increíble. Ya estaba enganchado".
Así empezaron décadas de romance, que le ha llevado a dedicar casi cada segundo de cada verano a perseguir a esta misteriosa mariposa.
Una mariposa rara
Pero los amantes de la hermosa criatura sólo tienen un momento para ser felices pues para finales de julio todas las tornasoladas mueren.
La pasión de Hulme es tan grande que le puso a su hija el nombre Iris en honor al nombre latino de la mariposa, Apatura iris.
La tornasolada es rara entre las mariposas. Rechaza las flores, prefiere los cuerpos en descomposición de los animales, las heces, los charcos de barro, incluso el sudor humano.
Vive en lo alto de los árboles, en el reino de los pájaros. Los machos, que presumen de una profunda iridiscencia púrpura, pasan sus cortas vidas "ebrios de savia de roble, alborotando en batallas en el aire y persiguiendo hembras vírgenes", dice Hulme.
"Es un gamberro violento. Ataca todo lo que aparece en su espacio aéreo. Incluso intenta perseguir a los pájaros grandes como los buitres, y tiene unos modales terribles".
No obstante, se le conoce cariñosamente como "Su Majestad", entre otras porque su nombre común en inglés es "emperador púrpura".
'Su Majestad'
- La tornasolada se definió como una especie, la Apatura iris, en 1758
- Sólo hay una mariposa más grande que la tornasolada en Reino Unido.
- Sus alas alcanzan hasta 8,4 centímetros.
- La mariposa adulta emerge a principios de julio, con picos en la segunda y en la tercera semana de julio.
- Se la encuentra sobre todo en los bosques del centro y el sur de Inglaterra.
- Su naturaleza esquiva hace difícil establecer cuántas hay en Reino Unido, pero se considera una especie que merece un esfuerzo de conservación.
El extraño comportamiento de "Su Majestad" inspira un comportamiento igualmente inusual en la gente.
En la finca del Castillo de Knepp, en West Sussex, se puede ver a gente con enormes cámaras y binoculares.
En uno de los senderos está Hazel Land, una mujer refinada de 71 años con un sombrero de paja y gafas de sol. Ha viajado durante cuatro horas desde Devon en busca de la mariposa.
Saca del bolsillo un trozo de queso maduro cubierto con papel de plástico.
"Huele fuerte, ¿quieres comprobarlo?", ofrece. "Lo utilizo como carnada, y juro que sirve. Y siempre puedes comer un poco en el almuerzo".
Sales y minerales
Hulme, que trabaja ahora para la organización Conservación de las Mariposas, ha traído su propia receta secreta: una pasta de gamba indonesia que huele horrible y se llama Belachan; la mezcla con agua caliente y la riega por el bosque. A veces añade pez de barro al escabeche.
La gente intenta "todo tipo de cosas ridículas" como anzuelo para conseguir una codiciada foto de sus alas resplandecientes, dice.
Esto incluye animales atropellados, caca de perro, pescado en descomposición e incluso pañales de bebé.
Se cree que las mariposas son atraídas por las sales y los minerales.
"Mi amigo Matthew puso una vez siete kilos de salmón en la copa de un árbol", dice Hulme.
"Las cacas de zorro mojada en pis son uno de los anzuelos más atractivos para la tornasolada. Sé de gente que lo primero que hace al salir es recogerlas en un cubo".
"Y hay una pasta muy buena de pescado llamada Shito, de Ghana, aunque no la he podido conseguirla en los últimos años".
Plegarias
En Bently Wood, Hampshire, la gente cuelga por tradición pieles de banano, aunque Hulme duda de su efectividad.
El reverendo John Woolmer, que publica una carta cada año sobre la situación de estas púrpuras mariposas en el diario The Times, utiliza incluso el poder de la plegaria.
Woolmer dirige un servicio en el bosque al comienzo de cada temporada de las tornasoladas en Northamptonshire para bendecir las rutas por el bosque. Su estola púrpura tiene mariposas bordadas.
Pero, aunque inusuales, las tácticas de estos perseguidores de mariposas no son nuevas. La tradición de atraer a las tornasoladas se remonta a 250 años atrás.
En tiempos victorianos, el apogeo de la colección de mariposas, las atraían colgando esqueletos en descomposición de cuervos y conejos.
A principios del siglo XX, el lepidopterólogo y experto en estas mariposas IRP Heslop importó un tráiler cargado con estiércol de cerdo y diseñó una red de 11 metros para cazarlas desde las copas de los árboles.
Recientemente, la gente ha intentado incluso hacer flotar globos púrpura de helio o expulsar nubes de basura para incitarlas a salir.
Hulme ha pensado en enviar cometas en miniatura o un dron, aunque protegiendo las aspas. "No nos gustaría ver una cortada en tiras".
Matthew Oates, el del salmón, es el principal experto británico en la tornasolada y ha dedicado 45 años a intentar entenderlas.
Dice que sólo recientemente se están empezando a desvelar algunos de los misterios que rodean a esta mariposa.
"Mucho conocimiento se basaba en asunciones y mitología. Hay grandes áreas sobre su ecología y otras dimensiones sobre las cuales no sabemos nada", dice.
La última de las tornasoladas de este año está por morir. "Sí, te pones triste cuando ves que todo se acaba hasta el año que viene", dice Hulme.