La OEA se pronuncia sobre Nicaragua
La Organización de Estados Americanos (OEA) votará este jueves una resolución impulsada por ocho países que busca crear una "comisión especial" en el seno del organismo para dar seguimiento a la crisis en Nicaragua. La votación se producirá durante una sesión extraordinaria del Consejo Permanente en la sede del organismo, en Washington.
El Consejo Permanente considerará un proyecto de resolución que, para ser aprobado, necesita el voto de 18 de los 34 estados que son miembros activos de la OEA y que fue impulsado por ocho países: Estados Unidos, Canadá, México, Colombia, Chile, Perú, Brasil y Argentina.
Rechazo de Managua
El Gobierno de Daniel Ortega ya rechazó el pasado lunes la creación de una "comisión especial" en la OEA para dar seguimiento a la crisis y elevó su "más enérgica protesta" al organismo continental por esta iniciativa de este grupo de países.
Según Managua, esa propuesta pretende "inmiscuirse en los asuntos internos que únicamente competen al Estado de Nicaragua".
El diputado Jacinto Suárez, jefe de relaciones internacionales del gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) de Nicaragua, expresó su malestar por la iniciativa: "Esa comisión es interventora. ¿En nombre de la relación con la OEA hay que aceptar la intervención? Que (la OEA) haga lo que debe, no andar jodiendo", afirmó Suárez en declaraciones que cita el diario "La Prensa" de Managua en su edición impresa.
Jacinto Suárez es uno de los pocos funcionarios del Gobierno, además del presidente Daniel Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo, que ha hablado públicamente sobre la crisis en el país.
La Comisión
De acuerdo al texto de la resolución, el objetivo es crear una "comisión especial" cuyo mandato "será contribuir a la búsqueda de soluciones pacíficas y sostenibles a la situación que se registra en Nicaragua".
Si se aprueba su creación, los miembros de la comisión serán designados como tarde el 10 de agosto por la Presidencia del Consejo Permanente, actualmente ocupada por Costa Rica.
Mientras tanto, la Iglesia católica media en un diálogo que comenzó en mayo y está estancado debido a los desacuerdos entre las autoridades nicaragüenses y la opositora Alianza Cívica, que aglutina al sector privado, sociedad civil, estudiantes y campesinos.
Como parte de ese diálogo, la Conferencia Episcopal propuso al presidente nicaragüense, Daniel Ortega, que adelantara a marzo de 2019 los comicios fijados para 2021; pero el mandatario ha rechazado esa idea y considera que los obispos están "comprometidos con los golpistas".