En enero de 2014, el FBI le encargó a Daniela Greene la misión de investigar a Denis Cuspert, un rapero alemán conocido como Deso Dogg, que se convirtió en un agente reclutador para el Estado Islámico. Uno de los más importantes, además. Sin embargo, en vez de investigarlo terminó casándose con él en Siria.
La información recién se hizo conocida en estos días, luego de una investigación de CNN.
Greene trabajaba como traductora del FBI y gracias a que hablaba un alemán fluido se le asignó la tarea de conseguir mayor información sobre Cuspert, una rapero gangsta que en 2006 fue telonero del estadounidense DMX que luego, ya instalado en Siria, se dedicó a hacer videos para llamar a la gente que se sumara a la lucha de ISIS.
Asegurándole a sus supervisores que se dirigía a visitar a su familia en Alemania, la experta en lingüistica viajó en junio de 2014 rumbo a Siria, donde contrajo matrimonio con el músico/recrutador, pese a que se encontraba casada en Estados Unidos. Además, le contó sobre el siguimiento que le hacía el FBI.
Bajo el nombre de Abu Talha al-Almani, Cuspert mostró sus sentimientos antiestadounidenses alabando a Osama bin Laden en una canción y amenazando con degollar al ex presidente Barack Obama en un video, además de aparecer en imágenes de propaganda sujetando una cabeza humana.
La relación no duró mucho. En agosto, arrepentida, viajó de vuelta a Estados Unidos, donde fue arrestada.
"Fui débil y no supe cómo manejar la situación. Realmente armé un enredo", escribió el 8 de julio de 2014.
"Estoy en un ambiente durísimo y no sé cuánto más puedo durar. Da lo mismo, es tarde para mí", añadió.
De regreso en su país, Green fue detenida. Según CNN, "aceptó cooperar con las autoridades. Se declaró culpable de hacer declaraciones falsas sobre terrorismo internacional y fue sentenciada a dos años de prisión federal. Fue liberada el verano pasado".
Cuestinado por el tema y por la baja condena que recibió, el FBI comentó escuetamente que gracias a la información entregada por ella, se tomaron "varias medidas en una variedad de áreas para identificar y reducir las vulnerabilidades de seguridad".
Contactada en la actualidad, Green -que trabaja como anfitriona en un hotel- no quiso entrar en detalles. "Si te hablo, mi familia estará en peligro", le comentó a la cadena estadounidense de noticias.
En octubre de 2015, se informó que Cuspert había muerto en un ataque aéreo estadounidense en Siria. Sin embargo, lo desmintió en agosto pasado, justo cuando Greene terminó de cumplir si sentencia.
