La expresidenta surcoreana defiende su inocencia al inicio de su juicio
La exmandataria conservadora, que podría ser condenada incluso a cadena perpetua, rechazó este martes los 18 delitos que se le imputan, entre los que destacan abuso de poder, coacción o filtración de documentos oficiales.
El caso de corrupción supuso su destitución y su arresto preventivo en marzo. A esta primera vista, que también fue la primera aparición pública de Park desde su arresto, asistió como testigo Choi Soon-sil, conocida como la "Rasputina" por su cercanía con la expresidenta y centro del escándalo que ha sacudido a la política y el mundo empresarial surcoreano desde el año pasado.
Ambas fueron sentadas juntas, aunque evitaron mantener el más mínimo contacto visual, según mostraron las imágenes captadas por distintas televisiones surcoreanas. Los fiscales sostuvieron que "los acusados, incluida la expresidenta Park Geun-hye, violaron la ley e ignoraron la soberanía popular y el estado de derecho por beneficio propio".
Park y Choi, que no ostentaba cargo público alguno, están acusadas de, entre otras cosas, extorsionar en torno a 50 millones de dólares a grandes empresas a cambio de que éstas pudieran recibir un trato de favor del Gobierno.
"Sin pruebas concretas", dijo la defensa de Park El abogado que lidera la defensa de Park, Yoo Yeong-ha, argumentó que los cargos que se le imputan a su cliente se basan en "la suposición y en la imaginación, y no en pruebas concretas".
"Muchas de las pruebas presentadas por los fiscales son meros artículos de prensa. ¿Desde cuándo la fiscalía usa artículos como evidencia criminal?", añadió. Park, visiblemente cansada y enfundada en un sobrio traje azul marino, se limitó a decir ante la corte que su postura "es la misma" que la de sus abogados.
El Tribunal Constitucional ratificó el cese de Park el pasado 10 de marzo, en lo que supuso primera destitución de un jefe de Estado del país asiático y el primer adelanto electoral en Corea del Sur desde que el país recuperó la democracia en 1987.
Tras perder su inmunidad presidencial, la fiscalía pidió para ella una orden de detención preventiva que se hizo efectiva el pasado 31 de marzo.
Entre tanto el liberal Moon Jae-in logró la victoria en los comicios del pasado 9 de mayo y se convirtió en el nuevo presidente del país.