La dura caída de Joe Arpaio, el alguacil de las redadas contra los hispanos en Arizona
El mismo día en que EE.UU. eligió como presidente a Donald Trump, el candidato presidencial con el discurso antiinmigrante más duro en la memoria reciente, uno de los rostros más visibles de la persecución de los indocumentadosel en el país salió derrotado.
Joe Arpaio buscaba ocupar la Oficina del Alguacil del Condado de Maricopa, en Arizona, por séptima ocasión consecutiva, pero el polémico jefe policial perdió su estrella.
En las votaciones del 8 de noviembre fue derrotado por el demócrata Paul Penzone, quien se llevó el 55% de los sufragios.
La mano dura de Arpaio en contra de los sin papeles de origen hispano lo hizo conocido en todo el país.
Pero también lo ha puesto frente a los tribunales. En breve será juzgado por desacato por no cumplir la decisión de un juez que prohibió que sus agentes utilizaran criterios raciales para detener a indocumentados.
En enero, a los 84 años, dejará la oficina que ocupó desde 1993.
Su estilo "duro"
"El alguacil más duro de Estados Unidos".
Ese era el título que Arpaio se acuñó durante las más de dos décadas de servicio en las que sus acciones policiales que rozaban los límites de la ley.
Los agentes de Maricopa tenían permitido detener a cualquier persona que fuera sospechosa de estar indocumentada simplemente por su aspectofísico, sin importar si había cometido algun delito.
La "caza de inmigrantes", casi todos latinos, se extendía a centros de trabajo en la que trabajaban extranjeros y en los que sus agentes esperaban encontrar a indocumentados.
También ha hecho que los prisioneros realicen labores encadenados unos a otros, con uniformes a rayas y ropa interior rosada.
En su prisión más renombrada, Tent City, los reos tienen camas bajo carpas al aire libre donde la temperatura supera los 50 ºC durante el día.
"No voy a cambiar mi política. No trabajo para Amnistía International, Libertades Civiles y esas bien intencionadas organizaciones", justificaba Arpaio.
Para Francisco Lara-Valencia, investigador de la Universidad de Arizona, el título de "alguacil más duro de Estados Unidos" era "una imagen que él se inventó" para adquirir notoriedad.
"Creo que lo que queda claro ahora es que no es el alguacil más duro, sino el más politizado, el más cruel, el que estaba dispuesto a quebrantar la ley o mirar a otro lado cuando algo no convenía a sus intereses", dice Lara-Valencia.
¿Por qué perdió su estrella?
Arpaio dice que usa "sentido común de toda la vida" en todo lo que hace como alguacil.
Durante más de 20 años tuvo el respaldo de los electores, cuyo perfil en Phoenix y sus suburbios ha estado dominado por jubilados de la región oeste y norte de EE.UU., de ideasmás conservadoras.
"Estamos más preocupados por los derechos de los inmigrantes ilegales que por los ciudadanos de nuestro propio país", dijo Arpaio en la Convención Republicana que eligió a Trump como candidato a la presidencia de EE.UU.
Además de las denuncias de violaciones a los derechos humanos, el modo de hacer las cosas de Arpaio ha sido costoso para los contribuyentes de Maricopa.
Diarios como The Washington Post y The New York Times han reportado que las demandas legales en contra de la oficina de Arpaio han llegado a unos US$50 millones de dólares.
El último caso es una acusación de desacato que el alguacil enfrenta por haber desobedecido una orden de un juez federal de detener las detencionesbasadas en el "perfil latino" de los sospechosos.
El juicio se iniciará en diciembre y, de ser encontrado culpable, Arpaio podría pasar seis meses en prisión.
Lara-Valencia considera que en la capital de Arizona existía un "hartazgo" con la forma de hacer las cosas de Arpaio y su oficina.
"En parte por las violaciones tan evidentes de la ley y en parte por que las acciones del alguacil Arpaio estaban costando cada vez más a los contribuyentes", dice el investigador.
Pero hubo un factor más: el temor de la comunidad latina en Arizona de que Donald Trump pudiera llegar a la presidencia generó un activismo mucho más fuerte en contra del alguacil de Maricopa.
"Tenían un discurso muy similar (Arpaio y Trump), pero creo que la experiencia de los latinos en Maricopa, el contacto directo con el alguacil, claramente dio energía a las organizaciones comunitarias para que actuaran en contra del alguacil Arpaio", opina Lara-Valencia.
¿Vienen tiempos difíciles?
La elección de Trump como el próximo presidente de Estados Unidos, quien prometió deportar a 11 millones de indocumentados, ha generado pesimismo entre la comunidad latina.
Pero era algo con lo que ya vivían los habitantes de Arizona y la elección de Penzone ha tenido un efecto diferente en la región que al del resto del país.
"El referente que Penzone tiene y el que está en el imaginario de los habitantes de Maricopa es el propio Arpaio. A Penzone se le eligió para que hiciera un trabajo diametralmente distinto", explica Lara-Valencia.
El alguacil electo dijo en su discurso de victoria que quiere "reinstaurar el respeto, la transparencia y la confianza" en la oficina del alguacil.
"Arizona se levanta por algo más grande. No importa de dónde vengas o cómo luzcas o en qué creas, todos vamos a respetarte", dijo.
Pero las políticas federales que active Trump siempre estarán por encima de las locales en Maricopa.