El gobierno japonés solicitó a las compañías aéreas que no acepten nuevas reservas de billetes para ingresar al país durante un mes debido a la preocupación por la variante ómicron, indicó el miércoles el ministerio de Transportes.
Japón confirmó el miércoles la detección de un segundo caso de esta variante en un pasajero procedente de Perú, país que oficialmente no ha registrado ningún caso de ómicron hasta la fecha.
"Hemos pedido a las aerolíneas que dejen de aceptar las reservas para nuevos vuelos de ingreso durante un mes a partir del 1 de diciembre", dijo a AFP un responsable del ministerio de Transportes, señalando que las reservas existentes no se verán afectadas.
El gobierno nipón había endurecido sus ya severas medidas fronterizas, prohibiendo la entrada de todos aquellos que no fueran ciudadanos suyos desde diez países de África austral.
También endurecieron las medidas de cuarentena para los japoneses y los residentes extranjeros procedentes de otras decenas de países y territorios debido a la aparición de ómicron.
El martes las autoridades anunciaron la detección de un primer caso en un pasajero llegado de Namibia, y el miércoles señalaron un segundo en un paciente procedente de Perú.
Ucrania pide a la OTAN medidas de "disuasión" contra Rusia
El pasajero, un hombre en la veintena cuya nacionalidad no fue precisada, llegó el 27 de noviembre al aeropuerto tokiota de Narita procedente de Perú y actualmente se encuentra aislado en una instalación médica, indicó el gobierno nipón.
Las fronteras de Japón han estado virtualmente cerradas durante gran parte de la pandemia e incluso en 2020 se prohibió la entrada de residentes.
Estas medidas fronterizas han sido parte crucial de la estrategia anticovid nipona, que no ha implicado confinamientos tan estrictos como en otras partes del mundo.
Tras un fuerte repunte de casos en el verano boreal, Japón registra pocas infecciones a nivel nacional y acumula 18.360 fallecidos durante toda la pandemia.
Un 77% de la población nipona está vacunada y el miércoles se empezaron a administrar dosis de refuerzo a quienes habían recibido la segunda dosis hace al menos ocho meses.