El primer ministro japonés Shinzo Abe prometió que Tokio organizará como está previsto en julio los Juegos Olímpicos, pese a las dudas provocadas por la pandemia del nuevo coronavirus, que ha motivado el aplazamiento o cancelación de numerosos eventos deportivos en todo el mundo.
Abe precisó que no tiene intención por ahora de decretar el estado de urgencia frente a la propagación del virus, que ha contagiado a más de 700 personas en Japón, con 21 fallecidos.
"Vamos a organizar los Juegos Olímpicos como está previsto, sin problemas, controlando la propagación" del virus, declaró el jefe del gobierno nipón en conferencia de prensa, dos días después de que el presidente estadounidense Donald Trump sugiriera un aplazamiento de un año de los Juegos.
"En coordinación estrecha con los responsables afectados, entre ellos el COI (Comité Olímpico Internacional). No hay ningún cambio en este aspecto", añadió Abe.
La pandemia mundial provocada por el nuevo coronavirus ha infectado a más de 151.000 personas en todo el mundo, con más de 5.700 muertos en 137 países, según el recuento de la AFP a partir de cifras oficiales.
Esta situación a llevado a su vez a aplazar, suspender o cancelar numerosos eventos deportivos y han despertado muchos interrogantes sobre la oportunidad de mantener los Juegos.
Desde la propagación del virus desde Asia al resto del planeta, los organizadores de los Juegos, el gobierno japonés y el COI han insistido en que los preparativos continúan y excluyen cualquier aplazamiento o anulación.
Charla con Trump
Abe se entrevistó el viernes con Trump, después de las manifestaciones del dirigente norteamericano. "Convinimos que Japón y Estados Unidos cooperarán y se coordinarán estrechamente para el éxito de los Juegos", explicó el primer ministro japonés, asegurando que no habían hablado de un eventual aplazamiento.
El presidente del COI Thomas Bach indicó el jueves que su instancia seguiría las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) a la hora de tomar la decisión de un posible aplazamiento y admitió que el aplazamiento de varios torneos clasificatorios para Tokio "crea ya serios problemas" de cara a la organización de la cita olímpica.
El Parlamento japonés votó el viernes un texto que orotga a Abe el poder de declarar el estado de urgencia para combatir la propagación del COVID-19, pero el primer ministro estima que por el momento no es necesario tomar esta medida de manera inmediata.
El estado de urgencia permitiría a las autoridades locales imponer a los habitantes un confinamiento domiciliario, cerrar centros educativos y limitar el uso de los lugares públicos. También autorizaría la requisición de terrenos y edificios para albergar hospitales de campaña.