Unos 2.000 inmigrantes, provenientes de Birmania y Bangladesh, fueron rescatados en los últimos dos días en las costas de Indonesia y Malasia, anunciaron las autoridades que advirtieron que miles de personas podrían encontrarse en alta mar.
Unas 1.400 personas fueron rescatadas el lunes, un día después del salvamento de otros 600 migrantes en un barco de madera frente a las costas de la provincia de Aceh, en Indonesia.
Más de 1.000 inmigrantes procedentes de Bangladesh y de Birmania alcanzaron el lunes las costas de Malasia tras haber sido abandonados por traficantes de seres humanos en aguas poco profundas de la isla de Langkawi, informó este lunes la policía.
"Pensamos que había tres embarcaciones con 1.018 inmigrantes a bordo", dijo el subcomisario de policía de Langkawi, Jamil Ahmed, quien no descartó la presencia de más migrantes en otros puntos de la isla.
Uno de los barcos fue confiscado, pero los otros dos lograron huir, señaló Jamil Ahmed, que explicó que muchas personas llegaron a la costa nadando.
"Nuestro equipo de socorristas descubrió otra embarcación con más de 400 inmigrantes rohingyas de Birmania y bangladesíes, a la deriva frente a las costas de Aceh esta mañana", declaró a la AFP Budiawan, responsable de los equipos de rescate.
Entre los migrantes había 92 niños, añadió Budiawan, quien, como muchos indonesios, sólo tiene un nombre.
Otros barcos con migrantes a bordo podrían alcanzar las costas indonesias, agregó.
"Estamos en alerta y listos para rescatarlos cuando recibamos" un pedido de ayuda, dijo Budiawan.
Los barcos, cuyo destino habitual es Tailandia, fueron al parecer dirigidos hacia los países vecinos después de que el gobierno tailandés tomara medidas contra los traficantes de inmigrantes, tras el hallazgo de decenas de restos en fosas comunes en "campos de esclavos" en el sur del país.
Las autoridades birmanas consideran a los rohingyas, una minoría musulmana de cerca de 800.000 personas, como inmigrantes ilegales procedentes de la vecina Bangladesh.
En los últimos años, la violencia sectaria ha obligado a miles de ellos a huir para salvar la vida.
Los rohingyas, considerados por Naciones Unidas como una de las minorías más perseguidas del mundo, intentan llegar a Malasia, un país de mayoría musulmana, pasando por el sur de Tailandia o el mar de Andamán, con la ayuda de traficantes sin escrúpulos.
En Indonesia, los pescadores ayudan a los equipos de rescate a patrullar frente a las costas de Aceh, en el noroeste del país.
Unos mil inmigrantes se encuentran en centros y en casas particulares de la región, donde reciben víveres y atención médica, añadió Budiawan.
Las autoridades elevaron el número de personas rescatadas el domingo en Aceh de 469 a 573.
Chris Lewa del Proyecto Arakan, un grupo de defensa de los derechos de los rohingya, dijo que cree que miles de inmigrantes se encuentran atrapados en el mar después de la represión del tráfico en Tailandia y Malasia de los últimos meses.
"Tailandia intenta impedir que los traficantes sigan con su negocio" y "los obligó a irse a otro lugar", dijo a la AFP.