India y Bangladés pondrán en marcha este viernes un acuerdo histórico en su frontera que permitirá a 50.000 personas de uno y otro lado elegir su bandera tras décadas en situación de apátridas.
El primer ministro indio, Narendra Modi, y su homólogo bangladesí, Sheij Hasina, firmaron este acuerdo sobre la delimitación de la frontera entre sus dos países a inicios de junio, durante una visita del jefe del ejecutivo indio a Bangladés.
El acuerdo fija la frontera entre los dos países, de unos 4.000 km, y pone fin así a una situación que envenena sus relaciones desde 1971, cuando la guerra de secesión de Pakistán oriental dio nacimiento al Estado de Bangladésh.
Unas 50.000 personas que viven en enclaves bangladesíes en India y en enclaves indios en Bangladés tenían de facto una condición de apátridas fronterizos, y estaban privados de educación, de atención médica y de servicios públicos, al no tener acceso a sus respectivos gobiernos.
Los responsables de las dos naciones izarán sus respectivas banderas en un total de 162 enclaves, 111 de ellos transferidos a Bangladésh y 51 a India, un minuto después de la medianoche del sábado local (18H01 GMT del viernes).
Cada país tendrá soberanía sobre los enclaves situados en su territorio.
La población que vive allí podrá decidir si se queda o si parte al otro lado de la frontera, y podrán adquirir la nacionalidad correspondiente a estos enclaves, que dejarán de existir.
Bangladés había dado luz verde a este acuerdo ya en 1974, pero el Parlamento indio no lo adoptó hasta el mes pasado.
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