El huracán Dorian, que se dirige lentamente hacia la costa sureste de Estados Unidos tras dejar al menos cinco muertos en las Bahamas, se debilitó a categoría 2 el martes, según el último boletín del Centro Nacional de Huracanes estadounidense (NHC).
Dorian, que golpeó las Bahamas el domingo como una tormenta de categoría 5 - la máxima escala - perdió fuerza, aunque sigue representando una peligrosa amenaza al avanzar hacia Florida a 3,2 km por hora con vientos de hasta 175 km por hora.
El huracán parece haberse detenido en la isla de Gran Bahama donde pasará aún buena parte del martes con sus lluvias torrenciales, según el último boletín del NHC a las 10H00 GMT.
Tras su paso por las Bahamas, se espera que se acerque a la costa este de Florida entre el martes por la noche y el miércoles por la mañana, antes de seguir rumbo a Georgia y Carolina del Sur, indicaron los servicios meteorológicos.
Tras días de incertidumbre sobre la trayectoria del huracán, esos estados ordenaron la evacuación de cientos de miles de habitantes.
En Florida, que cada año está en primera línea ante las tormentas durante la temporada de huracanes, los efectos de Dorian se sentían ya con fuertes lluvias, posibles tornados el martes y ráfagas de 98 km/h, dijo el NHC, con sede en Miami.
Mientras, en Bahamas, al menos 61.000 personas afectadas por el huracán tendrían necesidad de ayuda alimentaria, indicó la ONU, que espera luz verde del gobierno para efectuar una evaluación en el terreno.
"En términos de coordinación, es la Agencia caribeña de gestión de catástrofes (CDEMA) la que dirige la respuesta" humanitaria, declaró un portavoz de la Oficina de Asuntos humanitarios de la ONU (Ocha), Jens Laerke, ante la prensa en Ginebra.
Un portavoz del Programa mundial de alimentos (PMA), Herve Verhoosel, indicó a su vez que esta agencia especializada de la ONU espera que unas 14.000 personas requieran ayuda alimentaria en la isla Abaco y 47.000 más en la isla de Gran Bahamas.