AFP
El presidente peruano, Ollanta Humala, admitió este lunes que recibió aportes de Venezuela en 2005 para su campaña electoral, pero legales, y denunció una persecución contra su esposa, cuyo entorno recibió las transferencias de dinero.
"Se está haciendo una persecución, es una cosa tirada de los cabellos y exagerada (...) Se trata de una colaboración de empresarios venezolanos y de otros países, seguramente, pero que no tiene nada de ilegal", dijo Humala en declaraciones a la prensa.
El domingo, la prensa informó que tanto la madre de la primera dama, Nadine Heredia, como una amiga cercana, recibieron en sus cuentas bancarias un total de 87.451 dólares en el 2005 de la firma venezolana Kaysamak, de propiedad de un empresario a quien la prensa vincula como cercano al chavismo.
"En ese año ni siquiera teníamos partido. En el 2005, este colectivo nuestro recibió colaboración. Lo hicimos de forma bancarizada, para que no haya dudas", agregó Humala.
Los antecedentes han sido presentados por un fiscal -en coordinación con la Unidad de Inteligencia Financiera de la Superintendencia de Bancos- para justificar la reapertura de investigación a Heredia por presunto lavado de activos, que ya fue cerrada en 2009.
El abogado de Heredia, Roy Gates, explicó a la prensa que el envío de dinero a cuentas de personas allegadas a Heredia se hizo porque en ese momento el partido no existía y no tenía cuentas propias.
Aclaró que, en la medida en que no era un partido político creado formalmente, no tenía la obligación de declarar sus ingresos ante los organismos electorales.
Humala, quien fue apoyado explícitamente por el hoy fallecido presidente venezolano Hugo Chávez, participó en alianza con otra agrupación en las presidenciales de 2006, que perdió ante Alan García.
Tras distanciarse de Chávez y del discurso radical de izquierda, volvió a postular en 2011, cuando fue electo.