En Drenthe, Holanda, un grupo de hermanos fue encontrado tras pasar nueve años encerrados en una granja.
Según consignó El País, el culpable habría sido el padre de los jóvenes, quien los mantenía cautivos porque quería esperar con ellos "el fin del mundo".
Los cinco hermanos, con edades entre 18 y 25 años, habían sido encerrados en una granja apartada de una carretera del sector cuando apenas tenían entre 11 y 16 años. Ninguno de ellos podía mantener relación con el mundo exterior.
La policía pudo dar con el paradero de esta familia gracias a que el hermano mayor, de 25 años, había logrado escapar para dirigirse a Ruinerwold, la ciudad más cercana a la granja.
Luego de varios días vagando en la ciudad, se dirigió a una cafetería en particular un par de veces. En ese local, el joven llamó la atención del dueño por llevar cabello y barba larga, además de tener una mirada completamente perdida.
"Vino al café varias veces, la semana pasada pidió unas cervezas, pero luego cerramos y se fue. El domingo regresó y parecía muy confuso. Tomó cinco cervezas y entonces hablé con él. Me dijo que se había escapado y necesitaba ayuda. Entonces llamé a la policía”, dijo Chris Westerbeek, dueño del local.
Además, agregó: “No sabía dónde estaba y me dijo que no había salido en nueve años. También me dijo que tenía hermanos y hermanas, que él era el mayor y quería cambiar de vida”.
Cuando la policía local llegó al lugar se encontró con los otros cuatro jóvenes y un varón de 58 años que no mantiene ninguna relación sanguínea con la familia. Este último fue detenido por no colaborar con la investigación del caso.