Hollande promete seguir adelante con la reforma laboral
AFP
El presidente francés, François Hollande, prometió este viernes seguir adelante con su polémica reforma laboral a pesar de las huelgas y manifestaciones que han paralizado algunas industrias del país.
"Me mantendrá firme porque creo que es una buena reforma y debemos continuar hasta su adopción", dijo a los periodistas al final de la cumbre del G7 de Japón, y agregó que su país asegurará la "libertad de circulación" de los ciudadanos afectados por las huelgas de trenes y los bloqueos de refinerías y depósitos de carburante.
"Nuestro primer deber es (...) hacerlo todo para que los consumidores puedan abastecerse de carburante, proporcionar servicios públicos esenciales, permitir el transporte de todos y asegurar el buen funcionamiento de la economía", prosiguió el jefe de Estado.
"Hemos tomado las medidas necesarias y seguiremos tomándolas, siempre en el respeto de las libertades pero también con la primera de estas libertades que es la libertad de circular", insistió.
Para François Hollande, "aunque el diálogo es todavía posible, nunca está fundado en un ultimátum".
Hollande dejó sin embargo una puerta entreabierta a algunas evoluciones. "El texto irá al Senado y luego volverá a la Asamblea Nacional y es en ese marco donde se deben llevar a cabo las discusiones", agregó.
Las huelgas contra un proyecto de reforma laboral del gobierno socialista se extendieron el jueves a las centrales nucleares, provocando perturbaciones en el aprovisionamiento de gasolina, y enfrentamientos de jóvenes con la policía.
En la octava jornada de movilizaciones, la policía francesa usó gases lacrimógenos contra encapuchados durante una gran manifestación de protesta contra la reforma laboral en París, después de que algunos asistentes empezaran a romper escaparates y dañaran vehículos a su paso.
Una persona resultó seriamente herida, según la prefectura de policía. Fueron detenidas 32 personas en París, 62 en toda Francia.