El cuerpo decapitado del periodista Julio Valdivia, del diario mexicano El Mundo de Veracruz (este), fue hallado este miércoles en una violenta zona de ese distrito, informaron la policía estatal y organizaciones defensoras de la libertad de expresión.
"Condeno el cobarde asesinato del periodista Julio Valdivia (..). En coordinación con la fiscalía general del estado agotaremos los recursos para dar con los responsables", señaló el secretario de Seguridad y jefe de la policía estatal, Hugo Gutiérrez, en un comunicado.
La organización Reporteros sin Fronteras (RSF) exigió a las autoridades investigar si el crimen del reportero, de 41 años, está vinculado con su ejercicio profesional.
Con Valdivia son cinco los periodistas asesinados en México en 2020, según RSF.
"Que se agoten todas las líneas de investigación, principalmente las que tienen que ver con su labor periodística porque trabajaba en una zona marcada por la violencia ", dijo a la AFP Balbina Flores, representante en México de RSF.
El cuerpo del comunicador, además de una motocicleta de su propiedad, fueron encontrados sobre una vía férrea en una zona montañosa del municipio de Tezonapa, de acuerdo con información publicada por El Mundo.
Valdivia "trabajaba en una zona complicada donde hay grupos de la delincuencia, se tiene que investigar si él había informado de algo que molestó a esos grupos delictivos, es una línea fundamental", señaló a la AFP Ana Laura Pérez, presidenta de la Comisión para la Atención y Protección de los Periodistas en Veracruz.
Según la cuenta de Twitter de El Mundo, el periodista había dado cobertura el martes a un enfrentamiento entre policías y presuntos criminales en el municipio de Cosolapa.
Tras el asesinato, El Mundo publicó en su portal que la fiscalía estatal "indaga si el crimen está relacionado con su oficio" periodístico.
México es considerado uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo con más de un centenar de comunicadores asesinados desde 2000, según un recuento de la Comisión de Derechos Humanos (defensoría).
Más del 90% de estos crímenes permanecen impunes, denuncian organizaciones defensoras de la libertad de expresión.