El presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, rechazó este martes la toma por cuerpos de seguridad de las instalaciones del Poder Legislativo. Catalogó el hecho como un secuestro y sostuvo que la situación es una muestra de la persecusión política que enfrenta la oposición venezolana.
"Intentan secuestrar el Poder Legislativo mientras el dictador se atrinchera solo, en un palacio en el que no debe estar, sospechando de todos a su alrededor. Hoy vuelve a demostrar su miedo a la legitimidad de la AN", escribió Guaidó en su cuenta de Twitter.
Diputados venezolanos denunciaron que fuerzas de seguridad bloquearon los accesos antes de una sesión para debatir el procesamiento de legisladores por una fallida sublevación militar en contra del Presidente Nicolás Maduro.
"Cree que el Poder está en los edificios, en las gavetas, en un manojo de llaves. El Poder que alguna vez tuvieron lo perdieron cuando perdieron al Pueblo. ¡Y esta AN sí fue electa por la gente y defenderá su legitimidad!", declaró Guaidó.
Efectivos de la Guardia Nacional —a cargo de la seguridad del Palacio Legislativo—, policías y agentes del Servicio de Inteligencia (Sebin) permanecían en el edificio y sus alrededores, según los parlamentarios.
Desde temprano, los uniformados acordonaron las entradas del Parlamento, único poder en manos de la oposición. Vehículos blindados y una grúa fueron dispuestos en las cercanías, constataron periodistas de la AFP.
El pasado 7 de mayo, la oficialista Asamblea Constituyente despojó a diez parlamentarios de su inmunidad, luego de que el Tribunal Supremo de Justicia los acusara de apoyar el alzamiento de un reducido grupo de militares contra Maduro.
La rebelión fue liderada por Guaidó y Leopoldo López, liberado de su arresto domiciliario y quien luego se refugió en la residencia del embajador de España.
